Sobral intentará convencer a Froiz de que no descarte establecerse en Fragamoreira

Recreación del polígono de Fragamoreira, cuyo desarrollo se encuentra a día de hoy en punto muerto. dp
photo_camera Recreación del polígono de Fragamoreira, cuyo desarrollo se encuentra a día de hoy en punto muerto. dp

La noticia trascendida en los últimos días sobre la intención del grupo Froiz de hacerse con una importante superficie en el polígono de Barro-Meis ha hecho saltar todas las alarmas en el Concello de Poio. El motivo es evidente, puesto que el asentamiento de la firma empresarial en otro municipio echaría por tierra lo que el Gobierno de Luciano Sobral daba ya por seguro: la instalación de Froiz en el futuro polígono de Fragamoreira.

En mayo del año 2007, la que era entonces conselleira de Vivenda e Solo, la nacionalista Teresa Táboas, presentó el plan parcial del parque de Poio y ya entoces anunció que Froiz había apalabrado 90.000 metros cuadrados para construir un gran almacén logístico en el mismo, que generaría unos 200 puestos de trabajo. Esa superficie supondría ocupar el 42% del espacio destinado a uso netamente empresarial (calculado en 214.000 metros cuadrados) y el 23% del total (incluyendo todas las áreas y servicios, el polígono está proyectado con una extensión de 391.000 metros).

La realidad posterior, sin embargo, no fue la que había prognosticado el bipartito y la paralización de dicho proyecto desde hace años parece haber dado al traste con ese futuro.

Mientras Fragamoreira sigue siendo solo un plan sobre el papel (Xestur ni siquiera ha adquirido ni expropiado todos los terrenos necesarios para construirlo), el parque de Barro-Meis (promovido por la Deputación) está ya urbanizado y listo para recibir a las firmas interesadas en adquirir alguna de sus parcelas. La institución que preside Rafael Louzán ha mantenido ya conversaciones con Froiz, que optaría a convertirse en propietario de entre 75.000 y 90.000 metros cuadrados en su terreno.

Preocupación

El alcalde de Poio, Luciano Sobral, ha recibido con preocupación la noticia y, según explicó, hoy intentará ponerse en contacto con el propietario del grupo empresarial para conocer con exactitud cuál es la situación y «tratar de convencelo de que Fragamoreria segue sendo unha alternativa viable».

En palabras del regidor, «por suposto, no Concello respectamos que un grupo como Froiz ou calquera outro decida libremente sobre o seu futuro. Froiz está medrando, acaba de adquirir Moldes, e ten que resolver as súas necesidades de expansión e crecemento. Iso é evidente. Pero se marchase para Barro-Meis, sería unha gran perda para Poio. A permanencia desta firma é fundamental para o municipio, onde actualmente xa ten a súa sede social e o seu almacén principal. Move moitísimo emprego e dinamiza a actividade económica e, certamente, doeríanos que non quedase no noso concello».

Además, Sobral indicó que el futuro del polígono de Fragamoreira está estrechamente vinculado a la instalación de Froiz en su territorio: «Non fixera unha reserva formal de chan, senón que era de palabra, pero supoñía unha terceira parte da superficie dispoñible en Fragamoreira e a súa adquisición implicaría o impulso deste polígono».

Por todo ello, el alcalde afirmó que se pondrá a disposición de la empresa para intentar que Poio siga siendo su primera opción.

«Tratarei de falar co propietario do grupo para mostrarlle o absoluto interese do Concello en que non descarte esta alternativa e convencelo de que Fragamoreira é viable. Está situada nunha zona estratéxica e ben comunicada grazas ó Acceso Norte e á autopista», dijo.

Responsabilidades

No obstante, el regidor reconoció que el desarrollo del parque poiense sigue en el aire y que esa situación es un obstáculo para una compañía que necesitaría ampliar sus instalaciones a corto o medio plazo. De esta circunstancia responsabilizó a los actuales responsables de Xestur y de la Xunta.

«Dende que o PP está dirixindo Xestur non se deu nin un paso para levar a cabo o proxecto de Fragamoreira. Penso que é un retraso intencionado no que o xerente de Xestur, Javier Domínguez; e o voceiro do PP local, Ángel Moldes, non fixeron máis que poñer paus nas rodas para frenar o seu avance. Agora, este retraso pode levar a que esta empresa tan importante se decida por outro emprazamento e iso para Poio sería unha gran perda», indicó. «Os únicos avances que houbo para facer deste polígono unha realidade deunos o bipartito cando gobernaba a Xunta. Dende que está o PP non se fixo nada».

Sobral incidió en que «a viabilidade do propio polígono» en la parroquia de San Xoán «está vinculada» a la ubicación de las nuevas instalaciones del ente empresarial e insistió en que su marcha a otro municipio sería nefasta para Poio.

«Entre o Concello e Froiz sempre houbo moi boa relación e seguiraa habendo», dijo.

Comentarios