PONTEVEDRA. La Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra anunció la suspensión del juicio del crimen del embalse del Umia, cuyo inicio estaba previsto para el próximo lunes, 14 de octubre, con jurado popular. El motivo es el estado mental del estradense Jesús Piñeiro Mera, alias ‘Chicho’, uno de los cuatro acusados de la muerte del joven morañés Enrique Monteagudo Caldas, ocurrida el 22 de julio de 2010 en Cuntis, junto a la presa.
El auto, firmado ayer por el magistrado Antonio Berengua y que fue difundido por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), explica que el tribunal recibió el pasado 7 de octubre un informe emitido por la médico psiquiatra del Centro Penitenciario de A Lama, donde los cuatro acusados del crimen cumplen prisión preventiva. En el caso de Piñeiro Mera, permanece allí desde febrero de 2012, por lo que no agotó el plazo de dos años antes de ser llevado a juicio.
El informe médico refiere una sintomatología del susodicho «afectante a su estado psíquico, del que no se tenía conocimiento anterior» y que determinó la correspondiente averiguación encomendada a la médico forense para conocer por su informe acerca de si el acusado podía ser sometido al juicio señalado para la próxima semana.
Esto es así, prosigue el auto, porque «el derecho de asistencia letrada y el derecho de autodefensa constityuyen los pilares básicos sobre los que se asienta un proceso con la debida adecuación a las exigencias constitucionales» y las facilidades para dotar a una persona de la debida asistencia técnica de letrado aparecen recogidas en la Ley de Enjuiciamiento Criminal.
No está capacitado
En la comparecencia los médicos forenses ratificaron el informe que refiere que Jesús Piñeiro «no se encuentra capacitado para comparecer al juicio oral».
No obstante, el magistrado señala que a partir de ahora deben completarse los datos médicos con la observación, valoración -incluida la hipótesis de fabulación- y tratamiento del acusado en la Unidad de Psiquiatría del Hospital Provincial de Pontevedra. La razón esgrimida es que «el dictado de un sobreseimiento no debe ser precipitado y porque es remedio que debe aplicarse con suma cautela, pues el juicio oral es una exigencia general de la que la resolución anterior debe ser excepción».
Berengua añade que el problema viene dado porque no se pudo hacer antes la observación, valoración y tratamiento porque el tema se plantea a pocos días de la fecha señalada para la vista oral con tribunal del jurado y por eso se acordó la suspensión, una decisión que también pidieron Fiscalía y la acusación particular, así como la valoración psiquiátrica.
Mismas circunstancias
Las defensas de los acusados solicitaron su libertad provisional, pero tanto la acusación pública como la particular se opusieron a esta medida. «Se considera que los plazos de prisión preventiva no se cumplieron» en el caso de Jesús Piñeiro y de Héctor Vázquez, alias ‘Ziritione’, que ingresaron en A Lama en febrero de 2012.
En el caso de los dos primeros detenidos, Borja Coucheiro Sanjurjo y Adrián Ferro Couto, entre rejas desde junio de 2011, el magistrado sostiene que las circunstancias que fueron tenidas en cuenta para el mantenimiento de su prisión trascurrido el plazo de dos años no se han modificado «y, desde luego, no existe certeza de que el coacusado» Jesús Piñeiro «no pueda ser sometido a juicio posterior», concluye.
De este modo, los cuatro acusados continuarán en prisión provisional comunicada y sin fianza, según confirma el auto.
