Tres de los 14 acusados de pertenecer a la red de narcotráfico que introdujo en España más de 1.700 kilogramos de cocaína en abril de 2006 liderada por el hijastro de Oubiña, David Pérez Lago, han asegurado este viernes que no tuvieron nada que ver con las operaciones de transporte e introducción de droga que se les imputan.
Así lo han manifestado Tania V., José V.P. e Iván C. ante el tribunal de la Sección Primera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, presidido por el magistrado Javier Gómez Bermúdez, durante el segundo día del juicio que tiene previsto extenderse hasta el próximo 6 de abril.
Mientras que la mayoría de los acusados han reconocido los hechos que se relatan en el escrito provisional de conclusiones presentado por la fiscal Inmaculada Ávila, los tres imputados han insistido en que, aunque sí mantuvieron contacto en abril de 2006 con algunos de los acusados, no sabían que éstos formaran parte de una red de narcotráfico ni que en aquel momento estuvieran inmersos en una operación de introducción de cocaína.
De esta forma, la abogada Tania V. ha señalado que aunque fue el 19 de marzo cuando conoció al líder de la red, David Pérez Lago, no supo hasta el 30 de abril, día en que fue detenido tras fracasar la segunda operación de introducción de cocaína, que éste era el hijastro del narcotraficante gallego Laureano Oubiña y que lideraba una organización criminal dedicada al tráfico de droga.
Su declaración contradice la realizada el jueves por Pérez Lago, en la que aseguró que Tania V. no sólo era consciente de las operaciones que se llevaron a cabo a principios y a finales de abril de 2006, sino que participó activamente en ellas.
Además, el hijastro de Oubiña apuntó que fue ella la persona a la que le encargó velar por el bienestar de los miembros de la red que no había sido detenidos después de que las fuerzas de seguridad se incautaran más de 1.700 kilogramos de cocaína.
Tampoco coinciden sus versiones en lo que al tipo de relación que ambos mantenían tras conocerse el 19 de marzo de 2006. Mientras que Tania V. ha asegurado que pronto iniciaron una relación sentimental a raíz de que éste le pidiera consejo legal, Pérez Lago negó dicha relación, y defendió que sus encuentros con la abogada se produjeron por motivos puramente relacionados con las actividades delictivas que durante el mes de abril estaba llevando a cabo la red de narcotráfico que dirigía.
REDUCCIÓN DE LAS PENAS
Los acusados que han reconocido los hechos han solicitado una reducción de las penas que pide la Fiscalía a 9 años para Pérez Lago y 7 para el resto, alegando los atenuantes de confesión tardía, dilaciones indebidas y la reforma del Código Penal.
En cuanto a este último punto, la Fiscalía ya aclaró durante la primera sesión de la vista oral que independientemente de lo que ocurra en el juicio, la petición de penas para los 14 acusados se verán modificadas a raíz de dicha reforma, pasando de 20 a 18 años para el principal acusado y de 18 a 13 y medio para los otros.
A todos ellos se les acusa de un delito continuado contra la salud pública, en cantidad de notoria importancia y de pertenecer a una "organización criminal internacional dedicada al tráfico de sustancias estupefacientes por vía marítima", y se les pide por ello, además de las penas de cárcel, el pago de dos multas, que en total suman más de 900 millones de euros.
