Una chimenea es un elemento que aporta distinción a cualquier hogar. Ahora que se acerca el invierno es un momento estupendo para plantearse instalar una en casa. Existen chimeneas eléctricas decorativas que se encienden simplemente con un interruptor.
Actualmente, no solo existen las tradicionales chimeneas de leña o de gas, para las que lógicamente es necesaria una instalación más engorrosa si no está preparada en obra: tiro de chimenea, salidas de humos, tuberías de gas en el caso de las chimeneas de gas, etc. En este artículo se va a hablar de chimeneas eléctricas para los hogares más modernos.
Las chimeneas eléctricas, como su propio nombre indica, funcionan enchufadas a la instalación eléctrica, por lo que no queman madera o gas, sino que se conectan a la red como si de un calefactor se tratase. La diferencia con un calefactor al uso es que este electrodoméstico tiene la apariencia y el diseño de una chimenea y por supuesto su aporte de calor es bastante superior a la de un calefactor.
Estos aparatos proporcionan el calor gracias a unas resistencias y a un ventilador que expulsa ese aire caliente. Para completar el conjunto llevan sumado unos trozos de madera decorativos y un sistema lumínico que aparenta el efecto del fuego.
Evidentemente no aporta la energía calórica de una chimenea tradicional, más bien genera una climatización suave y agradable, de ambiente. Pero también es cierto que evita las desventajas de la chimenea clásica, como son la generación de humo y cenizas.
Ventajas de las chimeneas eléctricas decorativas
Las mejores chimeneas eléctricas imitan la estética de las chimeneas tradicionales gracias a luces led en su interior. Este efecto óptico genera la sensación de estar quemando leña o gas, pero lo cierto es que no se quema nada, por lo tanto, son súper limpias.
La instalación de una chimenea eléctrica es súper sencilla, solo hay que tener cerca un enchufe, nada más. No son necesarias unas condiciones especiales para la salida de humos ni hacer obras en la casa. Si se quieren encastrar en el muro para asemejarse a una tradicional, se puede hacer, pero en muchos modelos no será necesario. Todo dependerá del gusto del cliente y del estilo de su hogar.
Comienzan a generar calor enseguida, lo que significa que nada más llegar a casa se puede conectar y la estancia se calentará. Al contrario de una convencional, que requiere de un tiempo de trabajo previo para preparar la leña, encenderla y que comience a generar calor. La mayoría de estos aparatos vienen con un mando a distancia, por lo que cómodamente se puede graduar la temperatura
Diferentes modelos adaptados a todos los estilos
Dentro de la gama de chimeneas eléctricas existen distintos modelos en función de cómo se colocarán en cada casa. Las más destacables son:
Empotrables
Se trata de aparatos que van embutidos en la pared o muro. Suelen tener diseños bastante modernos y estilosos. En muchos casos se aprovecha el hueco de la anterior chimenea de leña para situarlas justo ahí y aprovechar ese espacio.
De pared
Se sitúan contra la pared, sin más requisito que un suelo que esté bien nivelado. Suelen presentar diseños más clásicos, similares a las chimeneas de leña tradicionales.
De pie o móviles
Son las más adaptables, puesto que se pueden colocar donde se desee y se pueden cambiar de lugar. Suelen ser menos eficaces a la hora de generar calor que las anteriores.
Leños eléctricos
Otra opción para aquellos que no quieren dejar de utilizar su chimenea de leña. Consiste en mantenerla, pero en vez de leña real, colocando en este aparato un elemento que se asemeja a un conjunto de leños. Genera calor, da la sensación de fuego real gracias a las luces, pero en realidad está enchufado a la red eléctrica, por lo que no es en absoluto peligroso, no genera humos ni cenizas y se apaga y enciende cuando se quiere.
