Un embrollo de más de dos toneladas de almejas

Todo empezó el 16 de abril, cuando la Xunta de Galicia remitió un comunicado a los medios en el que informaba del decomiso de 2.275 kilos de almeja interceptados en un control en el peaje de la AP-9 en Curro (Barro). Los bivalvos, informaba la Consellería de Mar, no tenían la documentación en regla.

Se trataba de un comunicado rutinario, que, sin embargo, ha obtenido hoy un eco inesperado, con la comparecencia de la abogada de A Illa Gabriela Suárez Dios, en representación del transportista que llevaba las almejas. La letrada asegura que las cuatro partidas que componían las más de dos toneladas de bivalvo estaban en regla. La Xunta ha confirmado, también hoy, que tres de las partidas sí cumplían la legalidad, pero que una cuarta no, por lo que fue resementada en una zona de libre marisqueo.

Pese a que el comunicado del 16 de abril indicaba todo lo contrario, Xunta y abogada han coincidido hoy en lo siguiente: una primera partida, de 800 kilos, no fue incautada en el control y fue puesta a disposición de su adquiriente, en el puerto de Marín. Las tres partidas restantes fueron trasladadas al Igafa, en A Illa, ya que la Xunta asegura que las empresas que figuraban como destinatarias negaron serlo en un primer momento. Sin embargo, los propietarios de dos de las partidas, de 300 y 400 kilos, sí reclamaron posteriormente sus almejas. La abogada dice que fue ese mismo día, el 16 de abril, pero que la Semana Santa impidió al Igafa hacer efectiva la entrega hasta el lunes. La Consellería se limita a informar de que la entrega se produjo «ao longo da última semana».

Quedaba una última partida, de 850 kilos. La letrada insistía esta mañana en que «al igual que las otras, dispone de su respectivo documento de registro y garantías sanitarias» y estaba a expensas de su regularización. Sin embargo, eso no llegó a producirse: la Xunta informó de que estas almejas ya habían sido resementadas el martes en una zona de libre marisqueo.

También existen discrepancias sobre si el vehículo en que se transportaba la almeja fue requisado. La Xunta lo anunció en su comunicado inicial, pero la abogada ha asegurado hoy que lo que se produjo fue una medida cautelar, que llevó el vehículo a la Comandancia de Pontevedra, pero que la decisión quedó sin efecto ese mismo día.

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