Una exempleada del hogar acusa a la esposa de Netanyahu de trato abusivo

La joven pide una indemnización de 55.000 euros por ser tratada "como una esclava"
Benjamín Netanyahu y su esposa, Sara Netanyahu
photo_camera Benjamín Netanyahu y su esposa, Sara Netanyahu

Una antigua empleada de la residencia oficial del primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, presentó este fin de semana una demanda contra su esposa, Sara, por presunto maltrato, informó este domingo el diario Haaretz.

La exempleada doméstica, de 24 años de edad y judía ultraortodoxa pide 225.000 shékel (cerca de 55.000 euros) de compensación.

Según el periódico, la mujer trabajó este año y tan solo durante un mes en la casa y asegura que era tratada como "una esclava" y que Sara Netanyahu la humillaba e incluso estuvo a punto de agredirla, e incluye al hijo mayor de la pareja, Yair, como partícipe de los presuntos abusos.

En la demanda se describe a Sara como alguien que sufría "frecuentes ataques de ira", profería insultos como "eres un montón de nada" o impedía al servicio usar algunos de los baños de la casa y solo les dejaba entrar en los de los guardias de seguridad.

De acuerdo con la demanda, tampoco se le permitía comer o beber, tomarse descansos o apoyarse sobre el mobiliario cuando estaba limpiando, una labor para la que debía seguir unas directrices "extremas".

El primer ministro israelí contestó en su página de Facebook a la acusación, revelada inicialmente por el diario israelí Yediot Aharonot y dijo que se trata de "un intento de chantaje".

Netanyahu arremetió contra el medio y la abogada del caso Naomi Landau, que también representó al antiguo mayordomo de los Netanyahu Meni Naftalí en una demanda de acoso interpuesta contra el Estado, responsable de su contrato en la residencia oficial.

El primer ministro israelí afirmó que "todo el mundo entiende que se ha encontrado un método para desacreditar a la familia Netanyahu y extorsionar dinero del país. Se trabaja unos días, se renuncia y (se gana) cerca de un cuarto de millón de shékel. Un trato lucrativo".

Añadió que estas acusaciones son "ficticias" y que el tiempo que la empleada pasó con su mujer "es más corto que la extensión de la misma demanda".

El caso se suma a denuncias similares de comportamiento incorrecto por parte de Sara Netanyahu, acusada en el pasado de trato humillante, despótico y dañino.

Comentarios