Vanessa Rodríguez presentó su renuncia a formar parte de SAL, adquiriendo la condición de edil no adscrita, por lo que no figura en los consejos de administración de las empresas Ínsula y Nauta. La decisión es oficial desde el día 29.
En su escrito, Rodríguez recuerda que SAL consiguió cuatro concelleiros "para otra forma de hacer política", de manera "desinteresada, valiente y responsable". Pero tras los acontecimientos protagonizados por sus tres excompañeros, que culminaron con la firma de un pacto con el PP, "utilizando ilegítimamente el nombre de SAL, todos esos valores han sido pisoteados".
La edil considera que el uso de las siglas de SAL para la firma del pacto, sin haberlo consultado previamente con los miembros y órganos del partido, "es totalmente ilegítimo". Rodríguez lamenta que "no le importase lo más mínimo ni a los tres concelleiros ni a Telmo Martín, quien fue advertido de ello por mí en un Pleno antes de que el pacto se hiciese efectivo".
La concelleira no adscrita expone que, "a pesar de haber demostrado ser la única legitimada", prefiere "cederles ese tristemente dudoso honor, porque no estoy dispuesta a secundar una batalla que ellos decidieron iniciar y que, seguramente, finalizaría en los Juzgados con una sentencia que llegará cuando ya hayan acabado los dos años de mandato".
Vanessa Rodríguez será edil no adscrita al decidir renunciar a SAL
La concejal recuerda que su partido había nacido "para hacer otra forma de política"
