SANXENXO. El Concello de Sanxenxo se verá obligado a promover una expropiación o, en su defecto, una permuta forzosa para poder adquirir todos los terrenos necesarios para la construcción del nuevo colegio de Vilalonga, que se ubicará en la urbanización de O Revel.
Este trámite será preciso después de que la Administración municipal no consiguiese llegar a un acuerdo con Ignacio Velón para que éste vendiese su parcela, que fue incluida inicialmente por error en la documentación enviada a la Consellería de Educación para el desarrollo del proyecto. Las reuniones mantenidas en las últimas semanas entre el dueño de la finca y la alcaldesa de Sanxenxo, Catalina González, no han servido para acercar posturas, a pesar de que ambas partes manifestaron en su momento su buena disposición para que hubiese ‘fumata blanca’.
El último encuentro tuvo lugar en la tarde de ayer. En el mismo estuvieron presentes, además de la propia regidora y de Velón, varios concejales del Gobierno municipal. El dueño de las parcelas rechazó la oferta económica realizada por la Administración local, tasada en 30 metros por metro cuadrado. A pesar de que Ignacio Velón ha recordado en más de una ocasión que el Concello le ofreció 50 euros hace seis años, el bipartito insiste en que la propuesta actual se basa en la tasación realizada por el arquitecto municipal en el año 2009.
