Vilalba y Calvos de Randín estrenan el año con las temperaturas más bajas de Galicia

Dos mujeres en la localidad ourensana (Brais Lorenzo/EFE)
photo_camera Dos mujeres en la localidad ourensana (Brais Lorenzo/EFE)

El municipio ourensano de Calvos de Randín y el núcleo de Lanzós, situado en un valle al norte de la localidad de Vilalba, en Lugo, han registrado las temperaturas más bajas del Año Nuevo en Galicia, con 7.1 grados bajo cero y 5.9, respectivamente.

Meteogalicia ha calificado esta madrugada de "muy fría", sobre todo en valles del interior, donde hubo heladas generalizadas, y el primer día del año, aunque gélido, ha recibido la consideración de "muy estable", con cielos despejados o poco nublados en general.

Algunos de los registros más destacados se han encontrado también durante esta jornada en Serra do Eixo (5,8 grados bajo cero), Castro Riberas de Lea (-5º), Xinzo de Limia (-4,9º) y Ordes (-4,8º).

El Año Nuevo ha llegado con un frío intenso aunque sin lluvias, y con nueve comunidades, una de ellas Galicia, y en concreto la provincia de Lugo, bajo aviso por riesgo de temperaturas muy bajas, las cuales irán subiendo ligeramente en próximos días.

En la provincia lucense, que estaba con una alerta por frío intenso, se confirmaron las sospechas y se llegó finalmente a -5 grados en zonas centro y sur.

Esta estampa ha tenido su contraste en ciudades como Vigo, donde sus habitantes han aprovechado que el sol lucía para disfrutar de tranquilos paseos por los alrededores de la céntrica playa de Samil.

La predicción contempla para mañana en Galicia algunos intervalos de nubes altas, y no se descartan lluvias débiles en las costas de A Coruña y de Lugo.

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) activó para hoy avisos de nivel amarillo por riesgo de frío intenso en Galicia, Andalucía, Aragón, Cantabria, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Madrid, Navarra y País Vasco, y asimismo en Canarias, pero en este caso por un frente de polvo en suspensión.

No obstante, según sus últimas previsiones, este mismo jueves empezará a producirse un ligero ascenso de las temperaturas nocturnas, que aliviará la intensidad de las heladas que persisten en puntos costeros y que son generalizadas en el interior.

Se espera también que poco a poco comience a disminuir la sensación térmica de frío al amainar los vientos de componente norte.

Así, según la Aemet, la presencia mañana de un anticiclón persistente mantendrá el tiempo estable en la mayor parte de la Península y en Baleares, con cielos poco nubosos o despejados.

En dicha jornada, los vientos serán flojos o en calma, las temperaturas subirán ligeramente y sólo se esperan algunas heladas débiles y nieblas matinales en zonas del interior.

Sin embargo es probable que el norte de la Península se vea afectado ya durante el propio fin de semana por el extremo de un frente que nublaría el cielo y causaría lluvias débiles, algo más abundantes en el Cantábrico oriental y Pirineo occidental.

Para el martes Día de Reyes y el miércoles, es probable que un nuevo frente atlántico alcance el noroeste y extremo norte de la Península con lluvias, más abundantes en el oeste de Galicia y descenso de temperaturas.

El sur peninsular y el área mediterránea serían las zonas con menos nubosidad y escasa probabilidad de lluvias en esas fechas, y en Canarias continuarían los vientos de componente este.

Comentarios