Representantes de la Organización de Productores de Pesca Fresca del Puerto y Ría de Marín (Opromar), de la Organización de Productores de Pesca de Palangre (Orpal), de Ribeira, y la Organización de Productores de Lugo se reunieron este martes en Madrid con la secretaria general de Pesca, Alicia Villauriz, para tratar de buscar una solución, una vez más, a los continuos cortes que sufren los armadores de los once buques del fresco gallegos que faenan en aguas de Mauritania en la única vía de comunicación que une a este país con Marruecos.
En el encuentro, los armadores gallegos pusieron sobre la mesa la necesidad urgente de buscar una solución a un conflicto que les está provocando a los empresarios cuantiosas pérdidas económicas. "Por primera vez en estos cuatro meses se nos dio cuenta de qué se estaba haciendo desde el Gobierno central, porque nosotros no teníamos conocimiento", explicaron los armadores.
Así, en la reunión, en la que participaron también la directora general de Recursos, Isabel Martínez; el subdirector general de Acuerdos Internacionales, Ramón de la Sierra Morales; el subdirector general para el Magreb, Javier Puig, y dos representantes de Asuntos Exteriores, se trasladó a los armadores que el Ministerio de Asuntos Exteriores, encabezado por Josep Borrell, ya "conocía la problemática" y que ya había movido ficha en el asunto, aunque los representantes del departamento de Borrell reconocieron que el conflicto "no tenía una solución a corto plazo ni nada halagüeña".
Así, explicaron a los empresarios gallegos que el ministro socialista, en una visita a Rabat la semana pasada, "preguntó a las autoridades marroquíes por el tema, porque también les afecta a ellos, ya que nosotros pasamos por Marruecos de camino a España", señalaron los armadores.
Asimismo, el ministro de Asuntos Exteriores, según fueron informados los empresarios, "planteó allí una solución que había propuesto el sector del fresco, que sería que Marruecos nos permitiese descargar la mercancía en el puerto más cercano a Mauritania, que es la rada de Dakha", para, de esta manera, esquivar los cortes en el vial entre los dos países africanos. "Parece ser que por parte de las autoridades marroquíes no hay ningún problema", indicaron.
Al mismo tiempo, las asociaciones gallegas aseguraron que el Gobierno estatal "se comprometió a luchar para que se incluya una vía extraordinaria que nos permita salir de aguas mauritanas con un trámite más breve que el actual". De hecho, "nosotros pondríamos las garantías económicas necesarias" para que fuese posible.
La necesidad de esta "vía extraordinaria para salir de aguas mauritanas" ya se puso sobre la mesa en el encuentro que los armadores mantuvieron en abril con autoridades europeas en Bruselas. Así, la Secretaría General de Pesca se comprometió a intervenir en las negociaciones de la Unión Europea con Mauritania.
Desde el mes de enero, la carretera que une los dos territorios africanos es escenario de diversas reivindicaciones que provocan el cese del tránsito de los camiones que se dirigen desde el puerto mauritano de Nouadhibou a España. Esto provoca cuantiosas pérdidas económicas a los armadores, ya que la cantidad de capturas que no llegan a puerto es muy elevada, mientras que las que llegan se ven afectadas en su calidad por la demora de horas e incluso días dentro de los camiones que los transportan a España.
