El deportista y docente Aarón González fue el encargado de dar en la tarde de este sábado el pistoletazo de salida a las fiestas en Marín. El boxeador natural de Mogor deleitó a los presentes en la Alameda Rosalía de Castro con la lectura de un pregón que entrelazaba su experiencia personal con la importancia y el peso que tiene el deporte en la villa marinense.
Durante su discurso mostró su eterna gratitud al pueblo de Marín, un lugar que siempre le apoyó en el desarrollo de su carrera y al que calificó como "de gran tradición deportiva y totalmente apto para la realización de cualquier disciplina". Precisamente Aarón quiso hacer hincapié en el resto de deportes que se practican en el municipio. Fútbol sala, baloncesto, ciclismo o taekwondo fueron algunas de los mentados. Y por supuesto el boxeo, con la especial atención a su club, el Team Thunder Marín, recientemente campeones de Liga Gallega y de los que afirmó que "no podemos presumir de ser los mejores pero sí de trabajar con un gran grupo de personas".
El pregonero también quiso destacar su otra faceta alejada de los cuadriláteros, que no es otra que la de maestro de escuela. Aquí, el agradecimiento fue dedicado a sus compañeros de profesión y sobretodo a sus alumnos. "De ellos aprendí las mejores lecciones de vida y les debo mil sonrisas", dijo Aarón González.
DEDICATORIA ESPECIAL. El momento de mayor carga emotiva llegó en la parte final del discurso, cuando el boxeador dedicó a su familia la lectura del pregón. "Ellos son los coprotagonistas de un documental que comenzó hace ya 20 años. Sin mi familia no habría historia y, probablemente, mi fuerza de voluntad y afán de superación no sería el mismo. Por ello, tienen mi gratitud eterna", dijo emocionado.
Para concluir definitivamente el discurso, el pregonero instó a los presentes a "no dejarse vencer por las adversidades, ya que rendirse no es la mejor opción para tener éxito y cumplir con nuestros sueños".
