El arrastrero 'Río Mau', propiedad del armador de Bueu Agustín Santomé, vuelve a faenar, después de que fuese retenido el pasado martes, tras recibir una inspección por parte de una patrullera irlandesa, que estimó que las cantidades de pescado de dos especies capturadas no habían sido bien valoradas.
Aunque inicialmente se les obligó a volver a puerto con motivo de esta supuesta infravaloración que los inspectores irlandeses detectaron, se les impuso otra denuncia a mayores por el mal estado de la escalera de gato, un acceso situado en un lateral del barco y empleado precisamente para llevar a cabo las inspecciones. Los patrulleros presentaron una demanda por considerar que no cumplía las condiciones necesarias y se convocó al 'Río Mau' a un juicio rápido.
Este viernes por la mañana tuvo lugar el procedimiento judicial para procesar la denuncia de los inspectores respecto a la escalera, que resultó en una multa para la embarcación. La cuantía, aunque no se ha querido hacer pública, estaba "dentro de lo que nos esperábamos", según declaró el propietario del navío, Agustín Santomé, que también aseguró a este diario querer continuar con la actividad cuanto antes y que "saldrán a faenar esta noche mismo" como era previsto antes de este incidente.
RETENCIÓN
La retención de dos días se produjo cuando una patrullera de inspección declaró que los datos que el patrón había declarado en el DEA no eran correctos. Por este motivo se obligó a desembarcar la mercancia en el puerto de Castletownbere para comprobar finalmente que los datos del capitán eran correctos, retirando todos los cargos impuestos por ello. "Hemos perdido dos días enteros de trabajo y eso supone pérdidas para la empresa", declaró el propietario del barco.
