La titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Cangas ha decidido enviar a prisión provisional comunicada y sin fianza a la séptima persona detenida por su supuesta relación con el narcosubmarino interceptado en noviembre en la ría de Aldán, en Cangas, con más de 3.000 kilos de cocaína ocultos en su interior.
Según han confirmado fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, la jueza ha tomado esta resolución después de que el detenido pasase a disposición del juzgado de Cangas, que instruye el caso, por videoconferencia desde un juzgado de Balaguer (Lleida) este viernes.
En concreto, este varón fue arrestado este jueves en Lleida por agentes de la Guardia Civil en el marco una operación que se ha saldado con la detención de otras seis personas que también ingresaron en la cárcel durante los últimos meses por su supuesta relación con el transporte y la descarga de la droga.
Todos los arrestados previamente han sido enviados a prisión acusados de un delito de tráfico de drogas.
El submarino portaba 152 fardos de cocaína, aunque posteriormente los encargados de inspeccionar el sumergible hallaron en su interior uno más de unos 25 kilos.
Las investigaciones, en las que colaboraron agentes de Portugal, Estados Unidos y Brasil, comenzaron cuando el Centro de Análisis y Operaciones en materia de Narcotráfico (MAOC) alertó al Centro contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) de que la nave se dirigiría a España por el Atlántico cargada de cocaína.
Desde ese momento se desplegó un dispositivo de detección de medios aeronavales de A Coruña y Pontevedra y se reforzó la presencia policial en toda la zona de costa para detectar la presencia del submarino en el que transportaban la droga.
La situación de temporal en el mar no permitió al semisumergible entregar la droga a una segunda embarcación y obligó a sus tripulantes a desplazarlo hasta la costa, donde los detenidos provocaron su hundimiento y lo abandonaron.
Esta maniobra fue detectada por una patrulla de la Guardia Civil con medios de visión nocturna, que localizó el lugar de llegada de la nave y la posterior huida de sus tripulantes.
En ese momento, se detuvo a una persona que apareció equipada con un traje de neopreno y horas más tarde se consiguió detener al segundo narcotraficante, mientras que el tercero logró huir momentáneamente de las autoridades.
