CASA Quintela es de los pocos locales de Bueu, e incluso de la provincia de Pontevedra, que pueden presumir de haber llegado al centenario. Y es que a pesar de haber vivido guerras e incluso ahora una pandemia, Casa Quintela nunca ha cerrado sus puertas.
La historia de este centenario establecimiento, situado en el número 24 de la calle Eduardo Vicenti de Bueu, se remonta a 1921 en la provincia de Ourense, concretamente en las parroquias de Feá y Santa Cruz de Arrabaldo: "Mis abuelos vivían allí y cuando se conocieron decidieron fundar Casa Quintela. En 1926 se trasladaron ya para Bueu", explica Antonio Quintela, de la tercera generación de la familia y actual propietario del restaurante junto a su mujer Ana Nantes.
Antes de Eduardo Vicenti, este local con raíces ourensanas tuvo diferentes ubicaciones en la localidad de Bueu, la primera de ellas en Petís. Posteriormente se trasladó a otro local cercano al actual y en 1932 finalmente se instaló en el número 24, donde ahora se encuentran.
Antonio cuenta que Casa Quintela no siempre fue un restaurante: "La palabra de restaurante sonaba muy lejana por aquel entonces, era más como una casa de comidas. También cuando nos trasladamos a donde estamos ahora teníamos un pequeño hostal en la planta de arriba, pero en los años 90 dejamos de dar ese servicio".
Fue en ese momento cuando Antonio se puso al frente del negocio familiar, aunque el mismo explica que "yo prácticamente nací con la bandeja en la mano. Siempre teníamos que echar una mano, tanto yo como mis hermanos".
Por eso, el hecho de haber estado desde muy pequeño "detrás" de la barra de Casa Quitenla, le permitió a Antonio ver pasar a mucha gente, incluso a grandes personalidades.
También sus abuelos y sus padres, anteriores propietarios, ya que 100 años de vida dan para mucho. "Me acuerdo perfectamente que mi abuela y mi padre me contaron que Adolfo Suárez, cuando era un joven abogado de Madrid, se hospedó aquí en el año 1969, si no me equivoco. También estuvo aquí Virgilio Zapatero, que venía mucho a veranear a Bueu", relata el buenense.
Con respecto a la esencia de Casa Quintela, a pesar de haber pasado 100 años, Antonio dice que "eso siempre lo vamos a mantener". La carta actual continua manteniendo los 'Platos de abuela', que son "los que siempre se hicieron en casa, los de toda la vida".
Sin embargo, el propietario explica que "es muy importante innovar y buscar nuevas fórmulas para no quedarse en el pasado", que en Casa Quintela es posible gracias al trabajo de Cristina Quintela, de la cuarta generación de la familia.
"Las cosas nuevas de la carta corren al cargo de mi sobrina, que estudió hostelería en Santiago y es la que se encarga de darle el toque moderno a la carta", cuenta Antonio, que cree que su sobrina será la que en un futuro se quedará al frente del restaurante para continuar la saga familiar.
Tras toda una vida en Casa Quintela, Antonio cree que lo que más le ha marcado con el paso del tiempo fue ser testigo del ciclo de vida de las personas: "Me impactaba mucho ver el ciclo de vida de la gente, de personas que llevaban toda la vida viniendo aquí y yo los recordaba. Es lo que a lo mejor más te acaba quemando después de pasar tanto tiempo".
Mañana, el local celebrará un aniversario digno de un centenario. Además de un picoteo informal, Casa Quintela contará con un poco de música e intentará que los amigos, clientes habituales y familia se sientan los protagonistas.
