Si de algo puede presumir Marín es que es tierra de buen comer. No hay más que visitar la villa una mañana de jueves para saber que los productos que venden en la Praza de Abastos están muy cotizados. Es más, miles de turistas repiten cada año destino en Marín no solo por sus playas y paisajes paradisíacas (que también), sino porque tomarse una tapa en una terraza del casco urbano o hacerse una churrascada de carne y pescado con productos de la ría no tiene precio.
Así, los que visitan la villa en verano se llevan consigo la morriña que todos los gallegos cargan en la mochila cuando abandonan su tierra, y que los turistas meten en su maleta cuando se van de Marín. Por suerte, el Centro Comercial Aberto Estrela de Marín, desde hace unos años, da la posibilidad a decenas de enamorados de la villa morracense y de sus productos que, en cualquier momento del año, estén donde estén, puedan saborear las mejores carnes, chorizos, pescados y mariscos de la ría pontevedresa.
"Temos un convenio con dúas axencias de transporte urxente. En dez horas os clientes teñen os produtos no seu domicilio", indica la asociación. Así, tres placeros no lo han dudado y han decidido satisfacer las necesidades de estos clientes que, pese a estar a cientos de kilómetros de Galicia, no se contentan con comprar cualquier producto: lo quieren bueno y a un precio asequible.
Manuel Ángel Entenza, del puesto de la Praza de Abastos Carnicería Manuel, asegura que "teño moitos clientes de Madrid, Barcelona, País Vasco, Cartagena...".
Manuel explica que los clientes que durante el año compran su carne, "filetes, chuletas, carne picada...moitos chourizos e lacón salado, que en Madrid non o hai", son turistas que veranean en Marín y le piden el número de teléfono para hacer sus pedidos.
Este placero marinense indica que este servicio es posible gracias al convenio de la asociación. Y es que "se o mando eu pola miña conta é moi caro, pero por ser de Estrela de Marín cóstame case a metade", afirma.
Begoña Rosales es la propietaria del puesto de Mariscos e Peixes Begoña. Esta placera envía su "marisco e algún peixe bo" sobre todo a la zona de Madrid, pues "nótase moito a diferenza de prezo dos produtos que teñen alí e dos que hai aquí".
Begoña subraya que no solo los turistas demandan su mercancía, pues vecinos y vecinas de Marín que cambian su residencia no pierden la oportunidad de comer como en casa.
"Podo ter uns quince clientes de Madrid que piden regularmente en festas ou cando teñen algunha celebración", indica, "ou mesmo se o peixe está ben de prezo chámoos por se queren algún".
"Tanto o peixe como o marisco chega perfectamente porque vai ben empaquetado", asegura.
Y para pagar la cuenta, los clientes hacen una transferencia bancaria, así de simple.
El tercer y último placero marinense que se animó a echar mano de esta iniciativa de Estrela de Marín es Manuel Ángel Loira, propietario de la Carnicería Manuel Ángel.
Manuel explica que envía paquetes a "Madrid, Barcelona, Bilbao, Cádiz, Coruña...a onde chamen", fundamentalmente es "xente que ven de vacacións e gústalle a carne e despois fan pedidos para levar".
Manuel utiliza este sistema desde hace años y sigue sumando clientes. Este verano, dos personas se han interesado por esta iniciativa, asegura.
Explica que la gente que realiza estos pedidos busca la calidad y el buen precio, ya que "a carne nas grandes cidades é moito máis cara".
