La Asociación Respeta –Rescata, Protege y Adopta– de Marín, que se encarga de forma desinteresada de controlar las colonias de gatos en la localidad así como dar acogida a varios felinos antes de su adopción, denunció la aparición de varios animales intoxicados desde el pasado mes de diciembre. Todos los felinos se encontraron en esta grave situación en la zona del Inferniño, donde se ubica una colonia de gatos controlada.
La protectora recibió el pasado mes de diciembre el primer aviso de la aparición de una gata de color negro que estaba convulsionando junto el gimnasio Mat's. Respeta se encargó de recogerla y llevarla de urgencias hasta Pontevedra, para después devolverla a la calle tras su recuperación. "Pensábamos que había sido un caso puntual", expresan desde la asociación. Sin embargo, el pasado sábado, volvieron a recibir el aviso de que otra gata en la misma zona –y con marca de castración–, mostraba signos de haber sido intoxicada. El procedimiento realizado fue el mismo.
La última llamada por envenenamiento de un felino la recibieron este jueves, también en la zona del Inferniño. "Cuando llegamos, el gato estaba convulsionando, por lo que la llevamos al veteranario Tukan para que nos confirmasen que evidentemente había sido intoxicado", relatan. Además de los tres avisos, varios vecinos comunicaron que otros dos gatos habían aparecido muertos en la zona.
Ante esta situación, la Asociación Respeta presentó una denuncia en la Policía Nacional de Marín y también presentarán por registro en el Concello una solicitud para que "intensifiquen en esa zona la vigilancia, ya que el envenenamiento en vía pública es un delito penada".
La protectora, que pide "humanidad, empatía y solidaridad", lanzó un mensaje de colaboración a través de sus redes sociales para intentar "dar con el individuo y llevarlo a los tribunales".
