La Guardia Civil de Cangas do Morrazo detuvo a un taxista de la comarca, de 65 años, como presunto autor de dos delitos de agresión sexual a menores.
La investigación se inició por la denuncia presentada en el Cuartel de la Guardia Civil de Cangas. Una menor relató una presunta agresión sexual ocurrida en el interior de un taxi,en el que se trasladaba de madrugada desde Cangas a su domicilio en Moaña acompañada de una amiga.
Según su testimonio, la agresión se produjo una vez que su amiga abandonó el taxi al llegar a su casa. El taxista, en un momento dado, detuvo el vehículo y le hizo comentarios relativos a su físico y su vestido. Después le acarició una pierna, intentando bajarle la parte superior de su ropa, y le propuso un acto sexual con una oferta: si aceptaba, no le cobraría la carrera.
El taxista, según la menor, desistió de la proposición cuando la menor fingió una llamada con su móvil a su madre. Acabó llevándola a su domicilio y allí de advirtió: "No me busques un problema".
La segunda víctima
Según informa la Guardia Civil, a la segunda víctima, también menor de edad, en una ocasión le pidió que le diera un beso.
El presunto autor de ambos delitos se vale de su profesión de taxista, aprovechando los servicios nocturnos para transportar a las menores a su domicilio después de salir de fiesta.
Las diligencias fueron puestas a disposición del juzgado de Guardia de Cangas. El detenido quedó en libertad pendiente de acudir al juzgado cuando sea requerido para ello.