La Guardia Civil detuvo a finales del pasado mes a tres jóvenes que sustrajeron un bolso del interior de un vehículo estacionado en una céntrica calle de Cangas y que contenía 13.000 euros, según informaron este viernes fuentes del instituto armado. El dinero, relató el denunciante del hurto, estaba destinado a pagar las facturas del material y las nóminas de los empleados de su empresa de construcción.
Detalló que dejó el vehículo sin cerrar con llave y se ausentó durante un breve espacio de tiempo, y al regresar se percató de que le faltaba el bolso que contenía el dinero. A raíz de los testimonios recabados, la Guardia Civil centró sus pesquisas en una pareja de jóvenes que residían en una vivienda deshabitada en el extrarradio de Cangas.
Al día siguiente, ambos fueron localizados en un establecimiento hotelero de Poio en el que estaban alojados junto con otro varón al que también consideró sospechoso. Los tres fueron sometidos a un seguimiento gracias al cual los agentes comprobaron que llevaban un tren de vida que no se ajustaba a sus medios económicos.
La Guardia Civil detuvo de nuevo a la pareja cuando regresó a su domicilio habitual en Cangas y en ese momento les fueron intervenidos 2.100 euros en metálico que llevaban consigo. Horas más tarde fue arrestado, también en Cangas, el tercer sospechoso como colaborador necesario en la comisión del hurto.
Las investigaciones no concluyeron hasta que días después volvió a ser localizada la pareja alojada, en esta ocasión, en un hotel de Cangas. La Guardia Civil consiguió recuperar otros 4.000 euros que la pareja había escondido en el domicilio de los padres de uno de los detenidos.
Tras pasar a disposición judicial, los tres detenidos han quedado en libertad con obligación de comparecer cuando sean requeridos.
