La crisis de materiales también está afectando a la vida cotidiana de la localidad marinense. El encarecimiento y la escasez de ciertos elementos está provocando retrasos en la finalización de uno de las proyectos más importantes que se están ejecutando en el municipio, el Paseo Alcalde Blanco, uno de los pilares fundamentales de la EDUSI Marín.
Estas obras, que comenzaron en diciembre del año pasado, tenían un plazo de ejecución de siete meses. Sin embargo, la pandemia, que afectó al inicio de la actuación, y ahora la escasez de materiales han retrasado por completo un proyecto que estaba programado para rematar en verano.
La alcaldesa de Marín, María Ramallo, asegura que, las obras del Paseo Alcalde Blanco "deberían estar terminadas, porque llevaban un muy buen ritmo de ejecución. Lo que faltan son pequeños remates", pendientes del retraso en la llegada de determinados materiales como el vidrio, acero y aluminio, necesarios para finalizar el local de hostelería de la punta: "Sin estos materiales, la empresa -UTE Prace-Emergis Construcciones- no puede finalizar algunos equipamientos".
En esta línea, para la finalización por completo de la obra, quedaría la colocación del mobiliario, la puesta en marcha y servicio de los juegos infantiles de agua, así como el remate de la cafetería.
"Esperamos que en la mayor brevedad y en las próximas semanas podamos terminar, si el tiempo también lo permite, y terminemos este año disfrutando ya de la apertura total de este paseo", expresa la regidora marinense.
De hecho, se estima que la remodelación del Paseo Alcalde Blanco podría darse por finalizada a finales del próximo mes.
Con respecto al resultado de los trabajos, Ramallo señaló que "creo que está quedando todo bastante bien. En definitiva tratamos de que cumpla la función para la que se renovó el paseo, que es la de pasear de una manera más agradable, que sea más atractivo ir hasta allí".
Además, la alcaldesa expresó la intención de que "podamos disfrutar de los nuevos equipamientos una vez que liciten los pliegos para su concesión y puedan estar en marcha tanto el local de hostelería nuevo, como el establecimiento que existía".
Sobre este nuevo espacio, la regidora dijo que "creemos que puede tener una gran salida de cara a poder disfrutarlo desde el punto de vista de la hostelería, sobre todo en una franja horaria que no produzca ningún tipo de molestias al entorno. No tiene viviendas cerca, por lo que puede ser un centro de referencia para poder disfrutar desde el punto de vista del ocio. Tenemos grandes esperanzas puestas en él".
Con esta obra, para la que se han destinado más de 1,3 millones, cofinanciados en un 80% por los Fondos FEDER, el paseo se convertirá en un nexo del casco urbano con el mar, recuperando un espacio que se encontraba toalmente inconcluso y que es muy utilizado por la ciudadanía.
El componente paisajístico será el gran protagonista de esta humanización, con una mejora integración entre esta y la zona en la que se ubicará el Auditorio (actual aparcamiento de Praza España), así como con el casco urbano.
La punta del paseo está destinada a una nueva zona de transición, gracias a la pieza de madera instalada a modo de graderío, donde se habilitaron pequeños miradores. El espacio también contará con áreas verdes amplias para acoger especias vegetales que sirvan de barrera visual de cara a la infraestructura de la Autoridad Portuaria que colinda con el paseo.
Estas áreas también cuenta con bancos de descanso, elementos de juego, juegos acuáticos, etc. El local de hostelería, además, cuenta con una cubierta practicable que funcionará como mirador.
