Cuarenta y ocho horas después de una de las reuniones más dolorosas con la Marina Mercante, las familias de los 21 fallecidos en el naufragio del Villa de Pitanxo exigieron este sábado en una rueda de prensa celebrada en Marín una nueva entrevista con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Esta petición surge a raíz de la desestimación por parte del Gobierno de la posibilidad de cualquier operativo de rescate de los 12 cuerpos que continúan desaparecidos por "inviabilidad técnica".
Con "profunda decepción", los afectados, que estuvieron portavoceados por María José de Pazo, Kevin González y Pablo More, se lamentaron de que el Gobierno quiera "dar carpetazo a todo lo referente al barco" sin atender el "compromiso adquirido" de localizar y bajar al pecio. Por este motivo "no descartan" emprender acciones legales.
Además del encuentro con Sánchez, los familiares han hecho un nuevo llamamiento a la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, "que no se ha puesto en contacto con ninguna familia". "Es preciso hablar, 21 trabajadores del mar han fallecido en circunstancias muy graves", señala.
A través de la lectura de un comunicado, las familias aseguraron que el Gobierno no les ha aportado ningún informe técnico que justifique la decisión de no realizar acción alguna en el lugar del hundimiento. Esta forma de proceder "sin estar motivada ni argumentada", muestra el "desinterés" de las autoridades españolas por averiguar las causas del hundimiento "y poner así punto y final a la tragedia marítima más grande de este siglo en España".
"No se puede afirmar que las acciones son inviables sin comprobar el estado en el que se encuentra el buque, es decir, si no se baja", señaló María José de Pazo, encargada de leer el documento, que reiteró que "absolutamente nadie puede hacer esta afirmación".
En relación con la reunión celebrada el jueves, explicó que los 23 familias que estaban presentes pidieron que se considerase la opción de localizar el lugar en el que se encuentra el pecio, descender al mismo, y elaborar un trabajo fotográfico y visual, ya que consideran que "no sería descartable" que algún cuerpo haya podido quedar enredado en el exterior del buque hundido.
Los familiares quisieron recordar que la Fiscalía ve indicios de homicidio imprudente en el hundimiento del Villa de Pitanxo y consideran que "es prioritaria" esta búsqueda si la intención es "esclarecer los hechos". Por este motivo, las familias manifestaron que "no vamos a renunciar a nuestro legítimo derecho como víctimas".
En ese mismo documento, critican que un mes y diez días después desde "la gran tragedia" no se haya elaborado por organismos competentes un mapa batimétrico, cuya función es determinar el intervalo exacto de la profundidad a la que se encuentra el buque hundido. Las familias especificaron que el delegado del Gobierno, José Miñones, no les transmitió ninguna información precisa sobre la localización y profundidad en la que está el barco. "Habría que dotar a un buque de un magnetómetro y un sonar de barrido lateral", indicaron.
"No vamos a renunciar a nuestro legítimo derecho como víctimas", aseguran
PRÓXIMAS ACCIONES. Las familias, además, avanzaron que se convocará una nueva concentración para el próximo sábado en Marín y que enviarán a todos los partidos políticos una moción que inste a continuar la búsqueda del barco "para que se vote en todos los plenos de los ayuntamientos". También solicitaron la presencia de los sindicatos en esta lucha.
María José de Pazo también comentó que la armadora continúa sin contactar con ellos desde que tuvo lugar la tragedia y que, aunque el viernes en el funeral conjunto celebrado en Marín pensaba hablar con Samuel Kwesi, el único superviviente que acudió al acto, "para preguntarle qué había pasado", vio al hombre "tan destrozado y con tanto sufrimiento, por los fallecidos, por las familias y por todo lo que vivió", que todos los familiares comprendieron que "hay que esperar".
"Hoy las viudas y huérfanos del Pitanxo son aún más viudas y huérfanos porque lo son también del Gobierno, que los ha dejado desamparados", lamentaron las familias de los 21 fallecidos en el Villa de Pitanxo.
