Cuatro familias con hijos que sufren alguna discapacidad se reunieron ayer frente al Concello de Cangas para demandar la apertura de una unidad de fisioterapia infantil en la comarca de O Morrazo.
Desde hace cinco meses, con el inicio de la pandemia, las sesiones de fisioterapia que los hijos de las familias afectadas recibían en Vigo se cancelaron y, a causa de ello, desde hace varias semanas se han visto obligados a acudir a centros privados para continuar con las terapias. Una situación que señalan se está volviendo insoportable económicamente.
Por ello, y con el apoyo de la concelleira de Asuntos Sociales y la Plataforma por la Sanidad Pública, se concentraron ayer en frente al Concello de Cangas para reclamar que se vuelvan a rehabilitar las clases de fisioterapia.
"Es lamentable que abran las playas, las discotecas o los bares y no la fisioterapia de los niños. Ellos no tienen por qué pagar esto", explica uno de los padres afectados, Raúl Novás.
A pesar de que lo primordial es recuperar el servicio y evitar tener que acudir a clínicas privadas, los familiares reclaman que se abra una unidad en O Morrazo para evitar los viajes de hasta una hora para recibir las sesiones.