La Unión Europea firmó a última hora de la noche de este miércoles el ansiado acuerdo pesquero con Mauritania, del que se benefician hasta seis buques marinenses.
El documento ha conseguido mantener las posibilidades de pesca hasta ahora acordadas, pero ha subido los cánones en todas las especies a excepción de las demersales.
El acuerdo llevaba en negociaciones desde la caducidad del anterior en 2019, cuando se acordó una prórroga del mismo para que los buques no tuviesen que paralizar su actividad. Llega además a tan solo tres meses y medio de la finalización de dicha prórroga y permitirá a la flota afectada continuar con su actividad en el caladero africano.
La armadora marinense María José de Pazo destaca la importancia de haber alcanzado el acuerdo para este caladero, que supone "mantener viva" la actividad de la flota del fresco en la localidad.
En una reunión mantenida en la mañana de este jueves con el sector, la responsable de la delegación de Pesca de la Unión Europea se comprometió con la flota y los estados miembros a que esté acuerdo sería presentado por el Consejo Europeo en septiembre, con el objetivo de poder ganar tiempo y tenerlo en vigor antes del 15 de noviembre para evitar así cualquier paralización de su actividad.
