INSPIRADA en el lado oculto de las historias del cine, la artista canguesa Rosa Neutro presenta estos días su muestra Estéticas do Cinema, dentro de la decimosexta Semana de Cine de Cangas, oganizada por el Cineclub. Una exposición que, en palabras de Neutro, "cierra un ciclo vital" en el que la iconografía del cine clásico jugó un perfecto papel de complemento a su proceso creativo.
El conjunto de obras que se podrá disfrutar hasta el próximo 20 de noviembre en el Auditorio de Cangas es una retrospectiva de trabajos que Neutro ha elaborado en los últimos ocho años, y que se suman a piezas completamente nuevas. Lejos de centrarse en los fotogramas e imágenes más conocidas del cine, la muestra se inspira en la memoria, colectiva e individual, y en los sentimientos y recuerdos que genera.
Este sentimiento es precisamente el elemento central de una de las obras que se podrá disfrutar, nacida de un descubrimiento en la casa familiar: unos programas de cine antiguos. "Hace 60 años se utilizaban para hacer garabatos, practicar caligrafía, hacer listas de la compra... y a mí me interesaba explorar esas historias que sucedieron en ese papel en aquel momento, ocultas a primera vista".
Neutro pretende así penetrar en la compresión de lo que esconden esas imágenes cinematográficas, "ahondar en esas voces que resuenan tras una sombra" y que se funden con las de los personajes que ya pertenecen al imaginario de todos gracias a la gran pantalla. Y es que las personas, sobre todo las mujeres, han cobrado también un importante papel en estas obras.
Partiendo de imágenes de diversas actrices, Rosa profundiza en las contradicciones de la identidad de estas instantáneas, creando collages que "indagan en esa fracturas que se creaban con el fotomontaje, pero que tienen que ver con esas partes no pautadas, que se relacionan directamente con la identidad" de estas mujeres, tan reconocidas a través de su imagen.
La exposición contará con varias piezas nuevas y entre ellas estará Uro y Ava. Inspirada en la afamada actriz con estrechos lazos que la unen a España, Ava Gardner, un mosaico de azulejos con cientos de imágenes suyas diferentes rodean como una alfombra a la figura de un toro en esta pieza, con una dimensión de 14 metros cuadrados.
"Es un animal lleno de contradicciones, muy hermoso, pero con un sentimiento entre la vida y la muerte que no comprendo, pero que me fascina", y que se hila mucho a la actriz, quien amaba los toros, explica Neutro, que recuerda que a Gardner también la denominaron en una ocasión "el animal más bello del mundo".
