El mayor tesoro natural de la villa marinense son sus playas. Una senda verde recorre la arteria que une Portocelo con Aguete, pasando por Mogor, pero en los pequeños recovecos de la costa de la localidad se esconden arenales con un encanto envidiable, pero que no siempre están en condiciones para ser utilizados por vecinos y turistas.
En esa situación se encontraba la conocida como Praia da Ribeira, que desde este sábado cuenta con nuevos accesos y una senda peatonal a través de la que se puede llegar hasta ella. Según informó el Gobierno local, la actuación nació a raíz de una demanda vecinal, que se enquistó en el tiempo por la necesidad de contar con el beneplácito de Costas. El objetivo era renovar toda la escalinata, que se encontraba en un estado de abandono total, y mejorar la pista que comunica los extremos del arenal.
![Detalle de la nueva rampa. CEDIDA - Marín]()
Detalle de la nueva rampa. CEDIDA
Además del OK del departamento autonómico, también fue necesario negociar la cesión de los terrenos con sus propietarios, que no pusieron impedimento.
Los trabajos se ejecutaron de manera intermitente durante los pasados meses, tal y como indican fuentes municipales, que aseguran que con la obra finalizada el paraje "adquiere mucho más valor del que ya tiene de por sí".
En total, se han invertido 36.000 euros en mejorar los accesos y, paralelamente, el Concello está tramitando el refuerzo de algunos de los puntos más sensibles del arenal ante Costas, para evitar que los movimientos de las mareas lo deterioren, "tal y como estaba sucediendo con el paso de los años".
