Las obras de humanización y mejora de la seguridad vial en la PO-546, más conocida como Concepción Arenal, comenzarán en el mes de enero, según aseguró la alcaldesa, María Ramallo.
Las actuaciones, que cuentan con un presupuesto de 1.615.136,01 euros, se ejecutarán en dos fases. La primera, que comenzará después de las Navidades, será el tramo que va de la Rúa Real hasta la intersección de José Trasande, y la segunda abarca desde esta última hasta la Rotonda das Anclas.
De esta manera, estas obras coincidirán en el tiempo con las que se están llevando a cabo en la Avenida de Ourense con motivo de la instalación del nuevo colector. Y es que tal y como confirmó la regidora la semana pasada, estas actuaciones se alargarán un año, ya que tras instalar el colector se procederá a humanizar la calle. Así, a principios de año las dos principales arterias de comunicación de la villa estarán en obras, lo que posiblemente generará complicaciones en el tráfico diario.
En breve, el Concello procederá a adjudicar el proyecto de mejora de la primera fase de humanización de Concepción Arenal, para la cual se han presentado 16 empresas. "Xa foron evaluadas polos técnicos municipais e polos servizos de intervención, estando na actualidade pendente de realizarse a adxudicación definitiva", informó el Gobierno municipal.
Según señaló el Concello, estas obras, que serán financiadas en un 80% por la Xunta y que conllevan la cesión de la titularidad de la calle, vienen motivadas por la falta de espacio en el vial para mantener los dos sentidos de circulación y aparcamiento a ambos lados. Asimismo, tal y como indicó el Gobierno municipal, "os constantes arranxos nas redes municipais fan aconsellable a súa substitución", por lo que el proyecto incluye una mejora en el saneamiento de la zona.
Las actuaciones consistirán en ampliar las aceras, construir una línea completa de aparcamientos, carriles de circulación con ancho suficiente en los dos sentidos, mejora de las redes de saneamiento y abastecimiento y del alumbrado e instalación de mobiliario urbano.
"Desde hai uns días tratar de aparcar en Marín converteuse en todo un exercicio de paciencia que pon a proba tanto a destreza e habilidade dos/as condutores/as como a súa capacidade para manter a calma. Desde o BNG de Marín non somos quen de entender como o grupo de goberno do PP non buscou solucións con antelación ao comezo das obras na Avenida de Ourense que ofreceran alternativas á redución de prazas de estacionamento", denunciaron los nacionalistas. "Estas xestións debían terse realizado antes do mes de setembro, que era cando estaba previsto o comezo das obras", añadieron.
