"Libertad y una parte de verdad". Esto es lo que significan los paisajes para el artista Xoán Cerviño, que el martes inauguró su exposición Paisaxes interiores en la sede del Ateneo Santa Cecilia, en Marín. La muestra, que permanecerá disponible en este espacio cultural hasta el próximo 3 de febrero, está compuesta por obras elaboradas a partir de pintura acrílica y que representan dos estilos opuestos: imágenes realistas y abstractas.
Los cuadros que se pueden encontrar en la exposición, además de dar vida a vistas captadas por el propio pintor, varían entre los trazos definidos y los difusos, dando lugar a paisajes que pueden ser reconocibles o, por otra parte, a explosiones de color de lo más irreales.
Para Cerviño, dar a conocer esta colección significa cumplir al fin "una deuda que tenía conmigo mismo". Aunque ha dedicado gran parte de su extensa carrera profesional en el mundo del arte a plasmar paisajes en los lienzos, esta es la primera vez que expone en una sala cuadros con paisajes figurativos, "a pesar de que me llamaron la atención desde que era pequeño", admite. Así, el artista llevaba años sintiendo "la necesidad de pintar escenas más sueltas y menos realistas, pero no sabría explicar el por qué ni el motivo de este deseo".
Las plasmados en las obras que ahora cuelgan de las paredes de la sala de exposiciones del Ateneo son imágenes que el artista recupera de su memoria: "Se trata de una gran colección de recuerdos obtenidos durante mis extensos paseos por la zona del Ulla y por Terra de Montes", unas andainas que el propio Cerviño asegura "son un verdadero disfrute para mí, llevo 50 años mirando y admirando estos paisajes y no me canso de ellos".
Tras estas rutas por diversos parajes naturales, el pintor se coloca delante de un lienzo e inicia su proceso de creación artística, para la cual, según cuenta, "no necesito contar con ninguna fotografía ni guía, porque yo mismo ya tengo almacenadas una gran cantidad de imágenes sobre paisajes en mi mente y de ahí las rescato".
Esa "libertad para plasmar sin tener que hacer una copia" es precisamente lo que a Cerviño le apasiona de pintar paisajes. Para él, cada uno de los que representa en sus cuadros "tienen una parte de verdad, pero a la vez también son abstracciones e interpretaciones de mi vista y de mi propia mente".
Un futuro con los paisajes como protagonistas
De cara al futuro, el artista Xoán Cerviño asegura que su intención es continuar llevando a cabo obras que tengan este tipo de paisajes como protagonistas. Sus próximos proyectos continuarán con lo iniciado en esta exposición y seguirán plasmando paisajes de estilo figurativo. A esta idea, Cerviño añade que pretende exponerlos "en gran tamaño, algo que tampoco solía hacer antes de esta muestra".
Durante sus inicios en el arte, hace aproximadamente tres décadas, los intereses de Xoán Cerviño se centraron en la escultura llevando a cabo obras con un estilo "muy tradicional", cogiendo "elementos de labores de campo". Aunque le gustaba, en la actualidad, el artista ve imposible que su arte se aleje de los paisajes, ya que, tal y como él mismo explica, "a estas alturas, ya no soy capaz de escapar de ellos, me considero un preso".
