La Organización de Productores de Pesca Fresca del Puerto y Ría de Marín (Opromar) ha organizado este miércoles en Conxemar una exhibición del uso de la impresión 3D para convertir descartes de la pesca, con escasa demanda comercial, y músculo de pescado picado en productos atractivos para el consumidor. La exhibición ha consistido en la conversión de cartuchos de mince (músculo de pescado picado) de especies como la bacaladilla o el lirio en piezas que se asemejan a vieiras y en espaguetis de mar.
La programación para la impresora 3D es obra de la viguesa Exga 3D y está formada por dos ingenieros y dos cocineros.
Actualmente hay cinco fábricas en el mundo de impresoras 3D para el sector de la alimentación, una de ellas en España, pero ninguna produce en serie.