El peor naufragio español del siglo XXI

Más de 150 personas de la flota española han perdido la vida por una tragedia marítima en las últimas décadas ► Marín todavía recuerda las del Arosa, el Pescalanza o el Condesa VIV
El Sin Querer Dos, en cuyo accidente perdieron la vida tres marineros y otro desapareció. AEP
photo_camera El Sin Querer Dos, en cuyo accidente perdieron la vida tres marineros y otro desapareció. AEP

El naufragio del pesquero Villa de Pitanxo es uno de los más graves que ha sufrido la flota española en las últimas décadas, el peor en el siglo XXI. Sin embargo, esta terrible tragedia se suma a una larga lista de accidentes y hundimientos que se han llevado la vida de más de 150 personas en los últimos años.

Uno de los más relevantes se produjo el 10 de noviembre de 1956, cuando el Ave del Mar , un pesquero de doce metros de eslora, matriculado en Moaña, se hundía en las inmediaciones de las islas Cíes. La intensa niebla pudo ser el factor determinante de aquel suceso que dejó 26 fallecidos.

A él le siguió una de las mayores tragedias marítimas de la ría de Vigo y de toda la comunidad gallega. Ocurrió la madrugada del 28 de enero de 1978, cuando el motor del congelador Marbel explotó a la altura de Cabo Silleiro. Desgraciadamente, 26 de los 36 tripulantes fallecieron en cuestión de minutos. Es el peor dato de fallecidos de los últimos tiempos.

En julio de 1984, otro congelador gallego, Montrove, desaparecía tras abandonar el puerto de Las Palmas con destino al banco de pesca sahariano. A bordo iban 17 tripulantes.

Casi un mes después, el 10 de agosto, 22 marineros se dieron por desaparecidos y otros cuatro fueron hallados muertos al naufragar un pesquero onubense, el Islamar III, a unas 15 millas de la costa marroquí.

Uno de los mayores golpes que recibió el pueblo de Marín se produjo en 1986, cuando el buque pesquero Condesa VIV se hundió en la costa sur de Irlanda y dejó cinco desaparecidos.

Siete años más tarde, el 30 de septiembre de 1991, 16 marineros desaparecieron (14 de ellos españoles) al naufragar el buque hispano-alemán Frank-C. En el suceso solo hubo un superviviente.

Marín volvió a estar marcado por la tragedia en el mar en el año 1998, cuando la embarcación Pescalanza  con sede en O Morrazo, se hundió a 12 kilómetros del condado de Cork. Seis personas sobrevivieron en aquel naufragio, que se saldó con cuatro fallecidos y dos desaparecidos.

Dos años más tarde, el 3 de octubre del 2000, el pueblo marinense volvía a sufrir otro naufragio. El Arosa se hundía a cinco millas de la costa, en el condado de Galway, Irlanda. Un suceso que acabó con la vida de siete marineros y en el que otros cinco desaparecieron.

A él le siguió el pesquero Amur, que cinco días más tarde se hundía en aguas del Índico, causando la muerte de ocho personas. Otras seis se dieron por desaparecidas.

El 2000 fue un año terrible para Galicia ya que otros cinco marineros murieron en la Costa da Morte a bordo del Panchito y otras cuatro personas en Santa Uxía de Ribeira, en el accidente del pesquero Buraz .

La comunidad gallega volvía a sufrir otro importante suceso en el 2001, cuando el Hansa, propiedad de un armador de Ribeira, se accidentó en el mar de Escocia. Este hecho tuvo una importante repercusión mediática, ya que un marinero sobrevivió más de 13 horas en estas frías aguas, convirtiéndose así en el único superviviente de un suceso que se cobró en total seis vidas.

Ese mismo año, el palangrero Fátima naufragaba a 230 metros de la costa de Lisboa. Cuatro de los marineros pudieron ser rescatados, pero otros siete fueron dados por desaparecidos y, finalmente, por muertos.

Otros 13 pescaderos, 11 de ellos gallegos, perdían la vida en el año 2002 en el sur de Italia tras el hundimiento del Zafir . Las siguientes víctimas se produjeron en las costas de Sisarga, donde cuatro personas fallecían por la tragedia de O Bahía . La siguiente fue en Lugo en 2005, ocho personas murieron en el naufragio del Sempre Casina .

A estos sucesos le siguieron el del Dinish en 2006, donde perdieron la vida tres personas; el naufragio del Nueva Pepita Aurora, con cinco muertos y tres desaparecidos; el del Mar de Marín , con cuatro marineros fallecidos en 2014; o el Santa Ana, el pesquero gallego que zozobró frente al Cabo Peñas, en Asturias, en el año 2014 y en el que desaparecieron ocho de sus ocupantes.

Los últimos incidentes que azotaron la provincia de Pontevedra fueron el naufragio del Nuevo Marcos en 2017, con cinco muertos; y el del Sin Querer Dos, en 2018, donde perdieron la vida tres marineros y otro de ellos desapareció.