MARÍN. El Ministerio del Interior ha admitido a trámite la solicitud de asilo político presentada por los dos polizones que llegaron a aguas marinenses a bordo del buque ‘Kristin C’ la pasada semana. Así se lo ha confirmado la Cear (Comisión Española de Ayuda al Refugiado) al abogado de uno de ellos, Gregorio Cantón, que ya se encargó de asesorar legalmente a los tripulantes sirios que también pidieron refugiarse en suelo español huyendo de la guerra que atraviesa su país.
Sin embargo, Cantón afea el secretismo con el que se ha llevado todo este asunto, ya que, a pesar de ser el abogado, «todavía no he tenido ninguna confirmación oficial por parte de ninguna administración». El órgano encargado de dar luz verde a estas peticiones es la Oficina de Asilo y Refugio, dependiente del Ministerio de Fomento.
El problema más grave radica en localizar a los polizones, que partieron hacia Polonia después de que el barco decidiese no pasar ni un día más en Marín de los que tenía previstos, a pesar de que Interior debía haber evitado que la embarcación abandonase la rada con los polizones dentro y su petición de asilo en estudio. Cantón considera que es un «escándalo» y no ha podido obtener demasiada información ni de Capitanía Marítima ni del consignatario del barco, que a primera hora de la tarde de ayer le informaba de que los polizones continuaban a bordo, pero a última hora de lat arde «nos confirmaron que habían bajado en Alemania, en una parada previa a Polonia, y que el barco había seguido su camino». «Es un cachondeo», declara impresionado Cantón, que teme que esto se acabe solucionando «a la brava» y los polizones no sigan el protocolo adecuado, que les obliga a venir a España para poder seguir atendiendo su tramitación Tripulación del ‘Kristin C’ explicando la situación de los polizones el día en el que pidieron el asilo en el Puerto de Marín. david freire de asilo.
Cear esperaba recogerlos en Polonia con la colaboración de organizaciones locales para traerles de vuelta a España
«Esto es un cachondeo», asegura el abogado de un de ellos, Gregorio Cantón, que teme que la solución se haga «a la brava»
El personal del Cear que está colaborando en el caso había desplegado un operativo para poder atender a los polizones en caso de que llegasen a la rada polaca. Ahora están intentando buscar alternativas para poder asistir a los solicitantes en Alemania.
Una vez que los polizones, uno de origen sirio y otro procedente de Palestina, vuelvan a España, podrán acceder a las ayudas que les ofrecen Accem (Asociación Comisión Católica Española de Migraciones) o Cruz Roja, que, por ley, son las dos entidades encargadas de atender a las personas que llegan al país y solicitan asilo político. De hecho, Accem fue la que tramitó la salida de los tripulantes sirios que hace algo más de un año llegaron a Marín y pidieron también quedarse al amparo del Estado español para no tener que volver a Siria.
Sin embargo, por el momento, ninguna de las dos organizaciones ha recibido ninguna notificación para auxiliarles. La tramitación de la concesión del asilo político tiene un plazo máximo de seis meses para resolverse.
