La suerte no siempre acompaña a todo el mundo, pero siempre hay alguien que cuando menos se lo espera le llamada a la puerta. Y es que en esta ocasión, la Primitiva dejó en el sorteo del pasado jueves por la noche más de 500.000 euros (exactamente 500.702) en una administración de lotería de la localidad de Marín. Sin embargo, los dueños desconocen quién es el afortunado, ya que nadie se acercó al lugar a dar la buena noticia.
Durante este viernes no se habló de otra cosa en Marín. De hecho, los más curiosos se acercaron a la administración para ver si a lo mejor se dejaba caer por allí el afortunado y para echar una ojeada al cartel en el que se podía contemplar la cuantiosa cantidad. Los clientes, entre bromas, cogían los boletos de la Primitiva mientras decían: "Foi un destes o que tocou, non?". No todos los días se reparte medio millón de euros en una localidad como Marín.
Peregrina Pereira, propietaria junto a su marido de la Administración Nº1 TICA de Marín, situada en la Rúa da Ponte, se mostró muy ilusionada por haber repartido este premio, que se corresponde al de Primera Categoría en un boleto de tres apuestas del jueves y del sábado. "Esperemos que el premio se haya quedado en Marín y que quién sea, que no creo que lo sepamos nunca, lo gaste con ‘sentidiño’ y gaste en todos los locales de la localidad", expresó Pereira.
Esperemos que la gente se anime un poco más a comprar, porque quieras o no este premio es un aliciente
Además de la ilusión de haber repartido este premio, la propietaria, que lleva al frente del negocio cuatro años, nunca había repartido uno tan cuantioso. Eso sí, la anterior titular de la administración, su suegra, sí que repartió un premio más elevado, de más de 700.000 euros.
El hecho de formar parte de una alegría como esta, provoca que entren más ganas de repartir más premios. "Queremos repartir más, claro, pero más con vista a Navidad que es un poco la que más carácter festivo tiene y que además se reparte el premio entre más gente y eso siempre gusta más", anota Peregrina Pereira, que además explicó que, en comparación de otros años a estas alturas, "se nota mucho el bajón en las ventas de la Lotería de Navidad".
Tras el confinamiento, cuenta que "nos costó mucho remontar", a pesar de que a día de hoy ya han recuperado un poco el ritmo de venta en general, aunque "no es la facturación de antes y de Navidad hay mucha diferencia con respecto a otros años". "Los chiringuitos de playa, por ejemplo, que cuando llega siempre empiezan a vender lotería, van casi la mitad", resalta.
El cierre completo de la actividad comercial con el estado de alarma también afectó de lleno a las administraciones de lotería. "Supuso muchísimos gastos haber estado cerca de tres meses cerrados. Obviamente hubo cero ingresos", remarca la lotera marinense. Cierto es que con la reapertura de nuevo de las administraciones de lotería, la gente se quiso encomendar a la suerte debido a la situación que se estaba viviendo.
Este hecho provocó que "la primera semana que abrimos tuviésemos mucha gente, pero a pesar de eso nos costó muchísimo remontar, ya que además los sorteos se fueron recuperando paulatinamente". Aún así, no fue hasta llegado el verano cuando se empezó a notar más movimiento en la administración de Peregrina, a pesar de que no fuese al mismo nivel de facturación que el pasado año. Por eso, el hecho de que la lotera haya repartido 500.000 euros en la Primitiva, puede ser un punto muy positivo de cara a las próximas semanas. "Esperemos que la gente se anime un poco más a comprar, porque quieras o no este premio es un aliciente", remata la marinense, que a pesar de todo cree que "no se avecinan tiempos buenos".
