Acercarse a sus clientes es el principal objetivo de los vendedores de la Asociación de la Praza de Abastos de Marín que han querido sumarse a una nueva iniciativa para acercar el producto local hasta el umbral de la puerta de los vecinos del municipio. Desde este miércoles, la plataforma mercadomarin.com se puso en marcha ofreciendo productos de pescadería, carnicería, charcutería y congelados a tan solo un click de distancia y sin salir de casa.
En su primera jornada en marcha, la página web recibió un total de 357 visitas que traspasaron las fronteras de Marín y llegaron a los dispositivos electrónicos de vecinos de Allariz, Monforte de Lemos o Ourense, destacan desde la asociación. Además, se realizaron un total de cuatro pedidos, dos de Ardán, uno de Santo Tomé y un cuarto del casco urbano.
El envío del producto es de pago para los pedidos de menos de 60 euros y se realiza cada día antes de las 14.00 horas para los pedidos realizados hasta las 11.30 horas y al día siguiente para los que se hayan hecho más tarde y se reparte de forma sostenible en una moto eléctrica. Estos repartos se podrán solicitar desde el centro urbano y desde las parroquias de Mogor, Seixo, San Tomé de Piñeiro, Ardán, O Campo, San Xulián y Cantodarea. Además, se permite también la posibilidad de recogerlo en el puesto de la Praza.
Entre los clientes esta nueva posibilidad ha destacado para enviar producto fresco a familia que se encuentra lejos
Este nuevo servicio, que acerca el comercio local a los hogares de la villa, ha sido recibido con entusiasmo por muchos de los clientes habituales de la Praza aunque hay quien se muestra reticente a la idea de no poder ver en persona el pescado cada día. "Vendí 33 años en Pontevedra y estoy acostumbrada a venir", explica la clienta Estrella Ignacio, aunque considera que se trata de una buena iniciativa para los más asiduos al uso de las tecnologías.
ENVÍOS DE REGALO. Sin embargo, esta nueva herramienta ha encontrado un tipo de cliente muy concreto. La vendedora Begoña Rosales realizó su primer pedido online, un total de seis centollas que un hijo quiso enviar como regalo de aniversario a sus padres, que viven en Ardán. Una posibilidad que ya le han comentado otros clientes y que espera que encuentre su impulso en la gente joven.
Precisamente es el público joven uno de los grupos de población que más mencionan los vendedores. El miedo a posibles contagios de los grupos de riesgo fue el motivo que impulsó un cambio de la clientela durante la pandemia, "los hijos vinieron a comprar por los padres", explica la vendedora Milagros Silverio.
"La clientela es más o menos siempre fija, pero hay gente mayor que no puede venir, que tiene miedo o que vive en las afueras y no tiene espacio para aparcar", por lo que esta nueva herramienta podría ser una buena salida para todos ellos.
La entrega a domicilio en la Praza de Abastos de Marín ya se realizaba desde hace un tiempo en el casco urbano. Los propios vendedores eran los encargados de colgar su delantal durante el tiempo necesario para poder acercar los productos a los clientes fijos que directamente contactan con ellos a través del teléfono.
En su primer día, la web ha recibido 357 visitas y se han realizado un total de cuatro envíos, entre los que destacan las parroquias
Sin embargo, este nuevo sistema además de permitir que los vendedores no tengan que dejar su puesto, es una oportunidad para enviar artículos a clientes que se encuentran en las parroquias. Así se lo plantea Maricarmen, que valora positivamente la iniciativa y encuentra una buena salida para poder enviarle productos frescos de la Praza a su hermana que se encuentra lejos.
La plataforma ha recibido una buena acogida por parte de clientes y de comerciantes que aseguran que, en estos momentos, cualquier medida que facilite las compras merece un periodo de prueba. "Todo lo que fomente las ventas es un empujón", explica Marián Graña, que ha querido sumarse a la plataforma y que ya estrenó con su primer pedido.
Sin embargo, algunos comerciantes se muestran reticentes ante la idea y prefieren esperar un tiempo para comprobar el funcionamiento del sistema. Lo mismo ocurre entre los clientes marinenses, con un puesto fijo al que acuden a veces desde hace generaciones y reacios a perder la costumbre de visitar la Praza para comprobar cómo está el producto cada día.
En lo que coinciden todos es en la necesidad de apoyar el comercio de la localidad. Esta herramienta permitirá a los vendedores asociados hacer competencia a grandes superficies, "por qué irse a comprar fuera, cuando puedes comprar aquí, también online", destaca Milagros Silverio.
