Doce años después de su muerte, el 'yanki' de Seixo sigue siendo una figura emblemática en tierra marinense. Manuel Balán, o más bien John Balan, nombre por el que se le conocida en su salto a la fama, dejó huella. No sólo entre los vecinos de Marín, si no en todas las gentes de los cientos de lugares que visitó y a los que llevó su gran espíritu.
La localidad marinense quiso recordarlo sábado una vez más. El festival 'Son de Marín' clausuró su novena edición con un homenaje a Balan, cuya presentación corrió a cargo de Julio Santos. A pesar de que no es la primera vez que este festival hace un homenaje a Balan, la emoción estuvo a flor de piel en un acto "simbólico e emotivo".
Santos comenzó el evento, que estuvo programado en torno al propio John Balan, contando algunas anécdotas de la vida de este polifacético personaje, un personaje "mítico deste pobo que naceu en Seixo nun ambiente humilde e morreu da mesma forma". Y es que cierto es que, en todos aquellos sitio que Balan estaba dejaba una marca que hacía que "falábase moito del e en moitos sitios. A xente presumía de que o coñecía".
Pero la figura de Balán es conocida por todos, a pesar de que el punto más alto de su carrera llegó en el siglo pasado. Por ese motivo, la EEI O Grupo empezó a trabajar con los más pequeños en un proyecto para estudiar la vida de este showman marinense y que los propios niños lo conociesen.
Durante el acto se proyecto un video en el que los niños salían cantando y bailando una canción sobre Balán compuesta por Benito Salgado, José Iglesias Buxán y Ricardo Parada. De hecho, el propio Parada de convirtió en el colofón del acto, realizando una actuación musical a la que nadie quiso faltar, a pesar de que los marinenses se mostraron tímidos al principio.
El hombre más 'yanki' nacido en Seixo
Antes, los asistentes pudieron disfrutar del famoso documental de John Balan, que en el 2017 se estrenó en el Cine Seixo, llenando sus butacas. Más allá de contar la vida más conocida del 'yanki' de Seixo, también se revelan algunos secretos de la vida del marinense, como es su faceta de dibujante. La proyección del documental dió paso a 'Cé Orquesta Pantasma'.
Como ya es tradición, durante el evento de sábado también se homenajeó a una asociación de la localidad de Marín, comprometida con el municipio. Lois Dopazo, en nombre del Ateneo Santa Cecilia, fue el que se llevó el regalo conmemorativo de este año.
John Balán fue mágio y emblemático. De un bar de Marín, en el que cantó por primera vez intentando disimular su 'gheada' típica de las localidades costeras, saltó a la fama. Pasó a forma parte de un grupo musical como vocalista y después comenzó su carrera como solitario, que llegó a su esplendor en los años 80. Sus boleros, su acento americano, su talento para imitar las voces de los westerns y cientos de onomatopeyas, así como su sombrero acabaron siendo un legado. "As persoaxes como Balán non se lles pode por límite".
