"Tenemos derecho a acceder a comercios sin que nos atiendan en la puerta"

Un total de 18 marinenses se han unido en una nueva asociación para reclamar los derechos de accesibilidad para las personas con movilidad reducida y demandar cambios en la localidad

 

 

La alcaldesa, María Ramallo, y el edil Manuel Santos, recibieron a la asociación esta semana en el Concello. DP
photo_camera La alcaldesa, María Ramallo, y el edil Manuel Santos, recibieron a la asociación esta semana en el Concello. DP

"Polos nosos dereitos" es no solo toda una declaración de intenciones, sino también el nombre escogido por un grupo de 18 marinenses dispuestos a luchar frente a las instituciones para reclamar la accesibilidad universal en toda la localidad. Gerónimo Durán es el presidente del colectivo, compuesto por personas de movilidad reducida, que esta semana se reunió con la alcaldesa, María Ramallo, y el edil Manuel Santos, para presentarse oficialmente y dar comienzo al cambio que esperan ver en Marín.

La asociación empezó al más puro estilo siglo XXI: con un grupo de whatsapp. Así comenzaron las conexiones entre sus integrantes en julio del año pasado, con el objetivo esencial de dar a conocer los problemas de accesibilidad que tiene la localidad. Que no son pocos.

El tanatorio, la Policía Nacional, el local de Correos o el notario son algunos de los espacios en la lista de la asociación que presentan problemas de acceso. "Correos tiene una rampa inviable, al notario no puedes acceder porque hay escaleras y en la Policía Nacional hay un salvaescaleras que sufre fallos técnicos habitualmente", enumera Durán, que insiste en que, lejos de denunciar directamente, pretenden dar la oportunidad a todos estos lugares de mejorar y remediar estos problemas, sin dejar "que pasen por encima de nosotros", sentencia.

Más allá de centrarse únicamente en el acceso para sillas de ruedas, la asociación hace hincapié en que la accesibilidad universal es precisamente eso, universal, y atiende a eliminar barreras arquitectónicas para todos, sin excepción. Cognitiva, arquitectónica y electrónica son solo algunos de los accesos que se deben garantizar para permitir el uso y disfrute del entorno a cualquier persona sin importar su discapacidad.

"Tenemos derecho a poder acceder a cualquier comercio o local, mirar lo que hay y escoger lo que queramos sin que nos tengan que atender en la puerta como se hace muchas veces", explica el presidente con respecto a los comercios de la localidad. "Creo que a nadie le gustaría que le atendiesen en la calle, pero eso no se ve", denuncia con respecto al acceso para sillas de ruedas. Por ello, entre los objetivos de "Polos nosos dereitos" se encuentra reclamar a los nuevos locales que abran en Marín que cumplan con la normativa actual para garantizar estos accesos, pero también en exigir a los establecimientos con licencias antiguas que las renueven para que cumplan con las exigencias de la ley porque "para eso están".

PROBLEMA DE VIVIENDA. Los problemas de accesibilidad no se limitan únicamente a comercios y edificios públicos. Y es que las personas con movilidad reducida se han topado también con un enorme problema para encontrar vivienda en Marín debido a las barreras que presentan las ya pocas opciones que hay. "Si soy una persona que vivo de alquiler y quiero cambiar de piso, estoy muy limitado a aquellos a los que puedo acceder. No es justo", explica Durán.

El colectivo prepara ahora su propia página web y espera poder reunirse con la alcaldesa próximamente para comenzar a asesorar al Concello sobre los cambios que se deben realizar. Las personas interesadas en contactar con ellos para colaborar o unirse pueden acudir a su local municipal en la Rúa Sagrada Familia, número dos.

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