Termarín, preparada para asumir las nuevas medidas del Canal de Panamá

Las últimas inversiones realizadas en la terminal, pensadas para adaptarse a la ampliación del canal portuario, le han granjeado éxitos, como la llegada de dos nuevas líneas de transporte

Estibadores en la terminal de Pérez Torres,operando con un buque de la naviera Hamburg Süd. G.GARCÍA
photo_camera Estibadores en la terminal de Pérez Torres,operando con un buque de la naviera Hamburg Süd. G.GARCÍA

El 26 de junio del 2016 quedó inaugurada la ampliación del Canal de Panamá, convirtiéndose en el proyecto de infraestructura más grande que la vía interoceánica ha tenido nunca desde su propia apertura, en el año 1914.

El aumento de su capacidad se tradujo en la creación de buques más grandes. Hasta el momento se hablaba de barcos Panamax, adaptados a las medidas de las antiguas esclusas del canal panameño, pero, con su reforma, los calados y las esloras de las embarcaciones se confeccionaron con mayores dimensiones.

Las radas gallegas tuvieron que ponerse manos a la obra para adaptar sus terminales y poder asumir nuevos tráficos transoceánicos, con los que hasta el momento no podían operar. Marín no se quedó rezagada, y ya puede decir que su terminal de contenedores está capacitada para acoger buques de gran tamaño.

Así lo han constatado las navieras más importantes del mundo, que han desviado algunos de sus tráficos a la rada marinense. Así, Termarín, consignada por el Grupo Pérez Torres Marítima, opera desde que se abrió el ampliado Canal de Panamá, es decir, desde el año pasado, con dos nuevas líneas de transporte.

La primera de ellas es la Maersk Line, de la naviera que está a la cabeza del sector a nivel global, y que hace ruta desde Namibia. La segunda es un servicio feeder, para transportes marítimos de corta distancia, y que une Marín con Algeciras y Tánger.

Estos nuevos tráficos se suman a la cartera de líneas que ya operaban en la rada antes de los cambios en el canal, como la línea de la naviera Hambürg Sud, que realiza escalas en Europa, México y en el Caribe; la que llega desde Nueva Zelanda cargada de fruta, que tiene carácter estacional, coincidiendo con la temporada del kiwi, o las descargas de la naviera chilena CCNT.

La ampliación del Canal de Panamá ha sido la oportunidad de oro para la expansión del puerto marinense, que, lejos de conformarse, busca incrementar esta tendencia, tentando a otras navieras, como MSC, o haciendo suyas más líneas.

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