Un trapichero de Marín ingresará en prisión por su reincidencia

Acepta dos años y medio de cárcel por vender droga en la Rúa do Forno

Imagen de la Rúa do Forno. GOOGLE
photo_camera Imagen de la Rúa do Forno. GOOGLE

La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra decretará el ingreso en el centro penitenciario de A Lama de A.C.L., de un vecino de Marín que reconoció dedicarse a la venta de distintos tipos de drogas (heroína y cocaína mezcladas con otras sustancias), habiendo sido sorprendido en compañía de una mujer en la céntrica Rúa do Forno de la villa morracense.

El procesado tenía sobre sus hombros varias condenas más por hechos similares que, atendiendo a su supuesta adicción a las drogas y al hecho de que no le fueron incautadas cantidades de notoria importancia, habían sido suspendidas cautelarmente. Tal beneficio tenía como premisa de obligado cumplimiento el hecho de no delinquir durante un período de tiempo determinado, algo que no cumplió. Por ese motivo, según informó tras el juicio la Fiscalía Provincial de Pontevedra, deberá cumplir las citadas penas privativas de libertad que se hallaban en suspenso.

El juicio quedó zanjado por la vía rápida, una vez que tanto A.C.L. como la segunda acusada, M.P.G.D., apostaron por reconocer los hechos en presencia del letrado de la Administración de Justicia y el fiscal jefe, Juan Carlos Aladro. A cambio, este último ofreció una reducción en las condenas de ambos (solicitaba cinco años para él y cuatro para ella), fijándolas en dos años y medio de prisión. En el caso de M.P.G.D., la escasa cuantía de la droga decomisada y su aparente adicción a las sustancias le servirá para esquivar la cárcel de momento, con idéntica premisa de no reincidir en los próximos dos años.

Los hechos que desembocaron en la actual sentencia se produjeron sobre las 2.30 horas del 7 de marzo de 2017, cuando los acusados "se concertaron para obtener un enriquecimiento ilícito mediante la venta a terceras personas de sustancias estupefacientes". según explica el Ministerio Público en el escrito de acusación que fue dado por bueno por los propios investigados.

EL PLAN PARA LAS VENTAS. "En ejecución de ese plan, ambos acusados se encontraban en la Rúa do Forno vendiendo heroína y cocaína a diversos compradores. Para lograr este cometido, empleaban el vehículo Opel Corsa propiedad de R.M.A.S., en el que tenían escondidas las sustancias estupefacientes en diversos compartimentos ocultos", añade la acusación.

"Agentes de la autoridad sorprendieron en ese momento a los acusados y procedieron a cachear a A.C.L., hallando en uno de los bolsillos una papelina", continúa el fiscal, que detalla que "en el interior del vehículo, escondidas en zonas ocultas tales como en el interior de una carcasa que separa el asiento del conductor del del acompañante, en la tapa del freno de mano, en el interior del claxon del automóvil o en el interior de uno de los embellecedores", fueron encontradas las sustancias que desembocaron en el arresto de ambos individuos, primero, y en el juicio celebrado este martes, después, cuya sentencia incluye el ingreso en prisión de uno de los investigados.

Cocaína pura. Vendían droga de gran calidad
Si se puede hablar de calidades cuando se habla de drogas, hay que decir que la cocaína que fue decomisada a los dos individuos juzgados este martes en Pontevedra era de primera. Así, les fue incautado un envoltorio de nueve gramos con un 83 por ciento de pureza, además de 31 bolsas ya preparadas que rozaban el 95 por ciento de riqueza.

Por el contrario, la heroína de la que disponían sí estaba muy adulterada, con purezas de entre el 59 y el 35 por ciento, además de una bolsa con restos.

El valor total de las sustancias que les fueron incautadas se calculó en su momento en unos 2.000 euros.