Unas doscientas personas se han concentrado en la tarde de este viernes en Moaña para protestar por las obras del puente de Rande, cuya gestión, dicen, supone "una burla" hacia los ciudadanos de la comarca, así como los problemas de circulación del tráfico que están causando. La concentración, convocada por los alcaldes de Moaña, Cangas y Bueu, en la comarca de O Morrazo, y también por el de Vilaboa, ha tenido lugar a las puertas de la casa consistorial moañesa, donde la regidora, Leticia Santos (BNG), ha procedido a la lectura de un manifiesto.
Los convocantes denuncian "la burla a los vecinos" que a su juicio ejecutan la concesionaria Audasa y el Ministerio de Fomento con los trabajos en Rande, al "anteponer los intereses privados a los de los usuarios". Santos ha censurado "el caos" que están causando las obras y ha reprobado que el proyecto de ampliación de capacidad de la AP-9, en concreto, en el tramo de Rande, "discriminase en un inicio a los ciudadanos de la zona".
Los alcaldes de Moaña, Cangas, Bueu y Vilaboa han solicitado una reunión con Fomento
Ha abundado en que el proyecto inicial los "obligaba a circular por los carriles exteriores"; una cuestión que, tal y como ha recordado, fue modificada tras las protestas de los alcaldes de los municipios afectados. Varios de ellos rechazaron acudir a la inauguración de las obras de ampliación del puente el pasado 30 de diciembre, un acto en el que estuvo presente el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
Los regidores consideraban que los trabajos estaban "inacabados" y que dicho acto se realizaba para "cumplir la condición de acabar las obras, que les permitiría aumentar el peaje en 2018". A pesar de que la ampliación del puente fue inaugurada a finales del año pasado, Fomento anunció en febrero el inicio de los trabajos de renovación del firme del tablero central de la infraestructura.
Estas obras obligan a canalizar el tráfico por las nuevas calzadas laterales, aunque se mantienen dos carriles por sentido de circulación.
No obstante, Leticia Santos ha revelado que el propio gerente de la UTE que realiza los trabajos "reconoció que la ampliación no estaba finalizada y que las nuevas obras no respondían a labores de mantenimiento, sino que estaban incluidas en el proyecto inicial".
Por ello, los alcaldes de Moaña, Cangas, Bueu y Vilaboa han solicitado una reunión con Fomento para trasladar su disconformidad con "la falta de previsión y de coordinación" en unas obras que provocan retenciones kilométricas y "ponen en peligro la circulación del tráfico en zonas como Domaio o Meira".
En dicho encuentro solicitarán, además, que se coordinen las acciones que afectan al tráfico con los ayuntamientos afectados y que no se obligue a los ciudadanos de O Morrazo a circular por el carril exterior durante el periodo de ejecución.
