13.000 kilos de cocaína en cuatro alijos entre noviembre y abril, récord histórico

Operación antidroga na zona da Illa-Vilanova de Arousa
photo_camera Agentes del dispositivo desplegado este domingo. GONZALO GARCÍA

Solo en una ocasión, en 1999, las Rías Baixas vieron una cantidad tan grande de cocaína en tan breve espacio de tiempo. En aquel momento, una gran organización colombiana liderada por El Negro se había establecido en Madrid y había conseguido establecer una vía que consideraban segura para introducir alijos en las Rías Baixas. Para ello empleaban un almacén en A Pobra do Caramiñal y disponían de los más intrépidos lancheros del momento a su servicio.

Ello fue así hasta que la Policía Nacional descubrió sus actividades y les incautó cerca de 13 toneladas de cocaína, la mitad de ellas en tierra (en A Pobra) y la otra mitad en el mar, a bordo del barco Tammsare. El Servicio de Vigilancia Aduanera participó en un operativo que desarticuló un entramado criminal que suministraba cocaína de elevada pureza tanto a España como al Reino Unido, que ya entonces se estaba convirtiendo en uno de los mercados principales para los narcos gallegos. 

21 años después de aquello y en plena era de la información se hace más difícil detectar los movimientos de estas organizaciones. Sin embargo, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, que manejan abundante información procedente de la DEA (Drug Enforement Administration) y de la NCA (National Crime Agency) británica tienen constancia de la tormenta perfecta desatada en Sudamérica, primero por la sobreproducción en la selva con las Farc como punta de lanza y últimamente también por la gran presión ejercida por Estados Unidos, que hace que los cárteles apuesten por envíos hacia Europa para mantener vivos sus negocios. 

El primer aviso (y vaya aviso) fue la caída del semisumergible de Aldán, el primer aparato de estas características interceptado en suelo europeo. Las más de tres toneladas que fueron aprehendidas en su interior sirvieron para acreditar un sistema que llevaba siendo utilizado desde hacía más de una década. Sin embargo, no permitieron la caída de los auténticos organizadores del asunto. 

Algo parecido sucedió con un velero con dos gallegos a bordo que fue interceptado pocas semanas después cerca de Canarias. 2.000 kilos de coca fuera del mercado, pero sin cabecillas. 

Las dos últimas operaciones, sin embargo, parecen más productivas. Sobre las 3,7 toneladas de las dos planeadoras apresadas el 28 de marzo habrá noticias definitivas en breve, pero se piensa que, igual que este domingo --cuando se desarticuló una red y se incautaron más de 4.000 kilos de cocaína en altamar--, tenía a sus auténticos responsables en la comarca de O Salnés.