Los temporales provocan una pérdida de arena en las playas de las Rías Baixas

Areanles como los de Canelas, Montalvo, Foxos, Paxariñas o Silgar se han visto afectados por las últimas ciclogénesis explosivas

Aspecto que presenta la playa de canelas. JAVI CASAL
photo_camera Aspecto que presenta la playa de canelas. JAVI CASAL

Félix' y 'Gisele', las dos últimas ciclogénesis explosivas registradas en este tramo final del invierno, han dejado su huella en las Rías Baixas. En el caso de Sanxenxo, además de provocar cortes de luz, caídas de ramas y algún que otro daño material, los temporales han dejado 'desnudas' algunas playas. La situación no es nueva, si bien es cierto que hay que remontarse varios años atrás para encontrar estampas similares a las que hoy se pueden encontrar en Silgar, Montalvo, Foxos, Paxariñas o Canelas.

Mención especial merece este último arenal. Las inclemencias meteorológicas de las dos últimas semanas, unidas a las mareas vivas, provocaron que el mar llegase prácticamente a los pies de la duna, cuando el agua raramente se acerca a más de una decena de metros. "Se ha dado una situación que es difícil de recordar", reconoce el concelleiro de Medio Ambiente, Juan Antonio Deza. La pérdida de arena es especialmente patente en el tramo de la playa más próxima a la villa de Portonovo. Allí, a día de hoy han quedado al descubierto varias rocas y piedras de gran tamaño "que hacía mucho tiempo que no se veían".

Algo similar ocurrió en Montalvo, donde, al igual que en Canelas, el viento hizo añicos un módulo de socorristas. Los operarios del departamento municipal llevan varios días pasando revista al estado de las playas, para determinar qué medidas se pueden llevar a cabo antes del inicio de la Semana Santa. En el caso de la arena, poco margen de maniobra hay. "La marea la devolverá", augura Deza, amparándose en antecedentes recientes. Así sucedió, por ejemplo, en 2014 y 2105 en Bascuas. La rudeza de aquellos inviernos convirtió a la playa nudista en un auténtico empedrado. No obstante, el arenal recuperó su mejor cara poco antes del inicio del verano.

En Silgar, el fuerte oleaje y la espectacular subida de la marea no solo puso a prueba la resistencia de la Madama, que volvió a salir airosa de su duelo con las inclemencias meteorológicas, sino que también formó el tradicional 'socavón' de arena en las cercanías del extremo que linda con el inicio del Puerto Deportivo Juan Carlos I. Los trabajadores municipales se afanan en nivelar la arena con el uso de un tractor, ya que, además, el agua ha 'empujado' mucha cantidad de superficie arenosa hacia los accesos, dejándolos semiocultos. En Foxos, el mar «se llevó toda la arena», asegura Juan Antonio Deza. De cara a Semana Santa, la Concellería de Medio Ambiente centrará sus esfuerzos en la mejora de algunos accesos. Por ejemplo, se acondicionará la entrada de la Ermida da Lanzada. Además, Juan Antonio Deza quiere retirar el cableado aéreo que hay en las inmediaciones de algunos arenales.

Sobre la mesa también está el estado de A Carabuxeira. Los vecinos del entorno advierten sobre la aparición de una nueva oquedad en uno de los accesos. El temor a que el mar vuelva a colarse por ahí y cause destrozos en inmuebles cercanos no cesará hasta que se tomen medidas.

Comentarios