Principios de 2019 o, si los plazos se acortan, finales de este mismo año. Estas son las previsiones que maneja el Gobierno municipal para poder iniciar la ansiada rehabilitación del Pazo de Quintáns, uno de los proyectos marcados en rojo en el pacto firmado la pasada primavera por Partido Popular y Sanxenxo Agrupación Liberal (SAL).
Fue el teniente de alcalde, Gonzalo Pita, el que reconoció el pasado jueves, durante un desayuno informativo, que las tareas para recuperar el vetusto inmueble, cuyo deterioro se ha acentuado a lo largo de los últimos años, podrían hacerse realidad antes de lo previsto inicialmente. El hecho de que el Estado haya dado el visto bueno a la petición realizada por el Concello para recibir una subvención que sirva para restaurar las instalaciones ha acelerado el proceso. "O ritmo márcao o Goberno central, pero pensamos que nos primeiros meses de 2019 a obra podería estar iniciada", señala el segundo de abordo del bipartito. A los más de 900.000 euros que destinará el Ministerio de Fomento para esta actuación, hay que sumarles otros 480.000 euros por parte de la propia Administración sanxenxina. A este respecto, Gonzalo Pita recuerda que "iso será posible grazas á aprobación dos últimos Orzamentos municipais".
Fue, precisamente, durante la etapa en la que Gonzalo Pita lideró el bipartito cuando el Pazo de Quintáns, construido hace unos 400 años aproximadamente, recibió la catalogación de Ben de Interese Cultural (BIC) por parte de la Dirección Xeral de Patrimonio. Esta era un requisito indispensable para poder aspirar a las subvenciones ofrecidas por el Ministerio de Fomento.
PROYECTO. Gonzalo Pita explicó que a día de hoy los técnicos del Concello ultiman los detalles del proyecto de rehabilitación, que deberá recibir el visto bueno del Ministerio. A partir de ahí, será necesario sacar la obra a licitación. Los cerca de 1,3 millones que se invertirán en la restauración de las instalaciones son una cifra suficiente, según asegura el teniente de alcalde. "O que non imos facer é deixar o Pazo de Quintáns a medias", garantizó.
En este sentido, el líder de SAL tiene claro que los más de 10.000 metros cuadrados que abarca el inmueble, los jardines anexos y la capilla que se encuentra en el interior de la parcela, son "un auténtico paraíso" y aspiran a convertirse en un gran reclamo turístico y patrimonial.
