Los especialistas antidroga del Grupo II de la Unidad de Delincuencia y Crimen Organizado (Udyco) de la Comisaría de Pontevedra y sus compañeros del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (Edoa) de la Comandancia capitalina seguían a última hora de este domingo trabajando para determinar el paradero de los dos lancheros que consiguieron huir en la madrugada del viernes al sábado tras lanzar al mar una tonelada y media de cocaína, de las tres que recibió el grupo criminal a unas 70 millas de la isla de Sálvora.
Las fuerzas de seguridad, apoyadas en los medios marítimos y aéreos de la Guardia Civil y del Servicio de Vigilancia Aduanera, consiguieron incautar 3.000 kilos que llegaban a la ría de Arousa a bordo de dos pequeñas lanchas. Sin embargo, solo lograron detener a los dos transportistas que optaron por no arrojar los fardos al mar. Peruano y gallego, están en las dependencias del Instituto Armado a la espera de prestar declaración ante la autoridad judicial.
Quienes consiguieron huir, tal y como se explicó el domingo, fueron los tripulantes de la segunda de las embarcaciones, que tomaron la decisión de lanzar los fardos (recuperados posteriormente en la ría por Aduanas) para ganar velocidad y así poder escabullirse, ya en la playa, del cordón policial presente.
El Juzgado de Instrucción de Cambados mantiene en estos momentos el secreto de las actuaciones, no solo por la búsqueda de los citados lancheros, sino por las investigaciones abiertas tendentes a identificar a quienes iban a recibir tan descomunal alijo en las Rías Baixas, posiblemente una de las mayores organizaciones activas en la actualidad. Al mismo tiempo, se investiga el barco desde el que se cargó la cocaína en las dos planeadoras.
