El hallazgo de un pescador durante la tarde de este martes en Sanxenxo, en una zona rocosa de Punta Faxilda, puso en alerta a los servicios de emergencias y a la Guardia Civil, que rápidamente desplegaron un dispositivo en el entorno costero de Noalla. Se trataba de una antigua granada oxidada, que se encontraba entre unas rocas, y en cuya desactivación participaron el equipo de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil, el Seprona y un equipo de los Gedex, según informaron fuentes de la Guardia Civil.
Después de que el particular alertara al 112 alrededor de las 17.00 horas, la central de coordinación dio aviso a las fuerzas de seguridad, que desplazaron a un equipo especializado de la Guardia Civil, que tuvo que acceder por mar hasta la zona, para poder llegar al lugar en el que se encontraba el artefacto, y que finalmente fue desactivado con éxito.
Para garantizar la retirada del dispositivo con total seguridad en una zona de difícil acceso como son las rocas de Punta Faxilda, se solicitó, además de la colaboración de la Guardia Civil, la de la Policía Local de Sanxenxo, que finalmente no llegó a intervenir.
