Un nuevo accidente de tráfico en la VG-4.1, la Vía Rápida do Salnés, vuelve a poner en entredicho la seguridad en este vial de alta velocidad, especialmente en el tramo existente entre las inmediaciones del cementerio de Noalla y el desvío de salida hacia el núcleo de esta parroquia sanxenxina.
El siniestro se produjo a las 7.30 horas de este lunes. Una vecina de Portonovo, de 39 años de edad, tuvo que ser auxiliada por efectivos de los Bombeiros do Salnés y del Servizo Municipal de Emerxencias de Sanxenxo, después de que el coche que conducía se saliese de la vía y acabase volcado sobre el arcén izquierdo, en dirección a O Grove. Al cierre de esta edición todavía no se habían confirmado las causas del suceso, en el que no se vio implicado ningún otro automóvil. La mujer, cuyas iniciales son L. L. M., viajaba sola. Los responsables del rescate tuvieron que retirar una de las puertas del turismo siniestrado, si bien no fue precisa practicar excarcelación alguna.
Una vez fuera de su vehículo, la vecina de Portonovo fue trasladada en ambulancia al Hospital Domínguez de Pontevedra. Fuentes consultadas explicaron que la conductora sufrió varios golpes, si bien, en principio, todo apunta a que las lesiones no eran de excesiva gravedad.
Hasta el lugar de los hechos también se desplazaron agentes de la Policía Local de Sanxenxo y de la Guardia Civil de Tráfico, que estableció un dispositivo especial para regular la circulación. Además, las tareas de retirada del vehículo y de limpieza de los restos esparcidos por la calzada se prolongaron durante más de una hora.
DESDOBLE. El lugar en el que se produjo este siniestro ya ha sido escenario de numerosos accidentes durante los últimos años, algunos de los cuales todavía son recordados por muchos vecinos, que inciden en la necesidad de que se desdoble la Vía Rápida, tal y como ocurrió hace una década con la Autovía do Salnés, entre Sanxenxo y Curro (Barro).
El pasado verano, las autoridades tuvieron que cortar por completo el tráfico, debido a una colisión frontal entre dos turismos, registrada también a pocos metros del camposanto de Noalla. Aquel siniestro dejó, además de cuantiosos daños materiales, dos heridos de gravedad, uno de los cuales tuvo que ser excarcelado por los Bombeiros y por el Servizo de Emerxencias de Sanxenxo.
En septiembre de 2013, otra mujer también tuvo que ser auxiliada tras otro accidente.