Si el infortunio no se hubiese cruzado en su camino en forma de un inesperado infarto, Vicente Bouzada Neira disfrutaría hoy en día de una más que merecida jubilación, después de ejercer como conserje del CEIP A Florida durante más de dos décadas. Sin embargo, el extrabajador municipal encontró la muerte el pasado 5 de agosto, mientras disfrutaba de una jornada veraniega en A Carabuxeira, apenas un par de meses después de iniciar su retiro.
Este viernes, alumnos, padres y profesores rindieron un sentido homenaje a Vicente plantando un carballo en el patio exterior del centro. Un grupo de estuadiantes de Educación Infantil y Primaria fueron los encargados de ayudar a una maestra y al director, Pedro Padín Solla, a enterrar el árbol, que servirá para recordar el paso de Bouzada Neira por el centro educativo de Padriñán. Además, Ana y Martín, de 5º de Primaria, leyeron un emotivo escrito, que fue elaborado por el profesor Antonio Tovar. La huella que dejó el exconserje en la escuela sanxenxina es muy marcada, ya que su predisposición a ayudar a alumnos y profesores era muy valorada por todos. Tal y como recordaba la madre de uno de los estudiantes del CEIP A Florida, "Vicente tratou con varias xeracións de alumnos e portouse estupendamente con todos".
La decisión de homenajear a Bouzada se tomó apenas unos días después de su repentino fallecimiento. Precisamente, la comunidad escolar había brindado a su antiguo compañero una gran comida de despedida a la conclusión del curso lectivo 2017-2018. En cuanto a la elección de la especie plantada en el patio, se optó por una autóctona, después de consultarlo con su familia, tal y como explicó la dirección.
