Después de que la comisión de gobierno, formada exclusivamente por concelleiros del PSOE, hubiese aprobado los Presupuestos del año 2016 y lograse el respaldo del BNG y de un edil no adscrito en el correspondiente a 2017, el Gobierno local tiene asegurado el visto bueno a los de 2018 por parte del Pleno que se celebrará el día 23, con los mimos apoyos que en el ejercicio anterior.
El alcalde, Alberto Varela, planteó este viernes el reto que persigue: que los dos ediles de Esquerda Unida (EU) y el único representante de Somos Maioría también le den su voto afirmativo.
Acompañado por la concelleira de Facenda, Luz Abalo, el regidor expuso que el Ejecutivo local reformó el borrador con el objetivo de dar cabida a la práctica totalidad de las propuestas presentadas por ambos grupos.
Varela dijo que "la inmensa mayoría" fueron incorporadas al presupuesto, y agregó que la razón por la que con algunas no fue posible hacerlo es de corte legal, ya que la legislación no permite que el Concello realice algunos servicios de los que se están encargado empresa privadas, como solicitan EU y Somos Maioría.
Después de que los dos ediles del BNG hubiesen hecho público que votarán a favor, en una rueda de prensa celebrada el día 15, el alcalde hizo público su agradecimiento a los nacionalistas, de los que subrayó que anteponen los intereses colectivos a las estrategias electorales, cuando falta poco más de un año para que se celebren las elecciones municipales.
Aunque en el entorno del Gobierno local no descartaban recientemente la posibilidad de que el PP cambiase el sentido de su voto y pasase de la negativa a la abstención, como ya sucedió en mandatos anteriores, esa hipótesis parece haber sido descartada, a tenor de las afirmaciones realizadas por el regidor.
Alberto Varela dijo que el partido de la gaviota "continúa en la línea de generar polémicas, pidiendo que hagamos en un año todo lo que ellos no hicieron en cuatro, y con mayoría absoluta, para después criticarnos en sus ruedas de prensa".
