"La recuperación ya se ha iniciado, es incierta, incompleta y desigual". Así lo manifestó este viernes el vicepresidente del Banco Central Europeo que participó en el foro económico que se celebra en A Toxa. Luis de Guindos entró de manera virtual en el evento para mostrar su visión de la respuesta que Europa debe dar a la situación que plantea la pandemia. Y tras cuya intervención dio lugar a un diálogo entre el expresidente del Gobierno Mariano Rajoy, el ex primer ministro italiano Enrico Letta y el politólogo y escritor Ivan Krastev.
De Guindos abrió la intervención haciendo una radiografía de la situación económica que ha dejado la pandemia al conjunto de Europa y arrojó algunas de las cifras clave para entender los tiempos que se avecinan. No solo vaticinó una caída del PIB del 8% ("aunque al principio se esperaba que fuera mayor) sin precedentes desde la segunda guerra mundial y que tardará al menos hasta finales de 2022 para recuperarse a nivel del 2019, sino que llamó la atención sobre la caída de la inflación, que no empezará a recuperarse hasta el año que viene, y el aumento del índice de ahorro de las familias debido al confinamiento y posteriormente debido al ahorro preventivo ante la situación de incertidumbre. Y advirtió que un nuevo confinamiento tendría efectos catastróficos para la economía.
La cuestión fundamental, recalcó el ex ministro, es "si la pandemia va a dejar cicatrices permanentes", el vicepresidente del Banco Central Europeo habló del choque financiero que ha provocado la caída de facturación de las empresas. Y de la importancia de llevar a cabo actuaciones de política fiscal, los Ertes y la concesión de liquidez son fundamentales. Además, De Guindos insistió en la importancia de que la reconstrucción debe producirse de manera simétrica entre los distintos países de Europa y aprobó el plan de fondos europeos como un precedente positivo desde el punto de vista de las acciones conjuntas en Europa.
CREACIÓN DEL EURO DIGITAL. El vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, considera la creación del euro digital "una obligación que los bancos centrales tienen que llevar a cabo".
Para el economista, el euro digital es una variable importante en un mundo cada vez más digital. "Cada vez la digitalización va a ser más relevante y tener una divisa digital es un acompañamiento imprescindible", señaló.
De Guindos explicó que en la actualidad existe un equipo interno del Banco Central Europeo que estudia las implicaciones de esta divisa digital desde el punto de vista de la estabilidad financiera. "En estos momentos tenemos los euros físicos, pero aquí lo que sería sería sacar una moneda de curso legal con naturaleza digital", añadió. "No es tanto que sea una alternativa empieza a ser una obligación que los bancos centrales tienen que llevar a cabo", dijo.
