Toda A Illa de Arousa se volcó este domingo con la familia de Iván Harry Otero, el bateeiro fallecido al volcar la embarcación con la que faenaba cerca de Ons el pasado martes tras sufrir un golpe de mar y cuyo cuerpo fue encontrado días después en la misma zona.
La lonja de A Illa se quedó pequeña para acoger a los centenares de personas que quisieron despedirse de Iván en una misa de funeral muy emotiva. Tras la misma, el hermano del marinero fallecido junto a familiares y amigos portaron el féretro hasta el cementerio. La lluvia no desanimó a los vecinos, que formaron una gran comitiva que recorrió las calles del pueblo en un absoluto silencio, hasta llegar al camposanto donde se dio sepultura a los restos mortales del vecino de A Illa.
Iván Harry Otero tenía treinta años de edad y era padre de un bebé de pocos meses. Bateeiro, pertenecía a la Asociación de Mexilloeiros Isleños San Esteban y era muy conocido en la Illa de Arousa, de cuya cofradía fue patrón mayor su padre. Gran aficionado al fútbol, había formado parte de la cantera del Céltiga y jugaba en el equipo de veteranos del club. También el equipo isleño quiso dedicar el encuentro que jugó este domingo en Portonovo a la memoria de su vecino con un minuto de silencio. Los jugadores del Céltiga lucieron un brazalete negro en su honor.
LA TRAGEDIA. El cuerpo sin vida de Iván Harry Otero fue localizado por su propio hermano el pasado viernes durante el operativo de búsqueda. El cadáver aparecía en el entorno del islote O Centulo, donde días antes habían sufrido un golpe de mar que hizo volcar la embarcación de nombre Rosa en la que faenaban ambos hermanos y un tercer marinero también vecino de A Illa. Estos últimos consiguieron llegar a tierra y salvar su vida tras el siniestro.
Las malas condiciones meteorológicas registradas la semana pasada complicaron las tareas de rescate en las que intervinieron varias embarcaciones del servicio de Guardacostas, el helicóptero de la Guardia Civil Cuco y el Pesca 1 de la Xunta.
También participaron los buzos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS), así como bateeiros voluntarios. Mientras, por tierra, efectivos de Protección Civil de Sanxenxo, O Grove, Ribeira y Muro recorrían la costa en busca del bateeiro desaparecido.
