Lantero denunciará al Concello de Vilagarcía para que cumpla el convenio urbanístico de 2004

Fábrica de Lantero. DP

"En estos 14 años hemos mantenido infinidad de reuniones con hasta tres corporaciones distintas y siempre hemos recibido buenas palabras", indican desde la fábrica

Los propietarios de los terrenos de la antigua fábrica de Lantero, en Vilagarcía, interpondrán un contencioso judicial contra el Ayuntamiento de la localidad para exigir que el grupo de gobierno incluya en la revisión del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) el convenio que la corporación firmó en el año 2004 con Hijos de Lantero.

El portavoz de la familia propietaria de los terrenos, Andrés Lantero; el director general de Lantero entre 1998 y 2012, Francisco González Cudeiro; y el asesor jurídico de la empresa, Javier García, han ofrecido este jueves una rueda de prensa "obligados por el reiterado incumplimiento por parte de las distintas corporaciones del convenio firmado en su día", según han manifestado.

Los propietarios de Lantero justifican que recurren a los tribunales después de que el citado convenio no haya sido incluido en el borrador del PXOM que el gobierno local envió a la Xunta para el trámite de evaluación ambiental, que corresponde a la Consellería de Medio Ambiente. "En estos 14 años hemos mantenido infinidad de reuniones con hasta tres corporaciones distintas y siempre hemos recibido buenas palabras. Pero cuando ha llegado el momento de la verdad, el primer documento oficial de la revisión del PXOM no incluye el convenio", ha indicado Francisco González Cudeiro.

Ante esta "inacción", los propietarios de los terrenos de la antigua fábrica de Lantero, ubicados en la avenida Rosalía de Castro, en el casco urbano de Vilagarcía, consideran que "no" les "queda otra alternativa que pedir amparo ante los Tribunales de Justicia" para tratar de hacer valer sus "legítimos derechos" y para "reparar el gravísimo daño que el incumplimiento del Ayuntamiento de Vilagarcía ha causado a la empresa".

ANTECEDENTES. El 25 de noviembre de 2004, José Lantero e Hijos S.A. y el Ayuntamiento de Vilagarcía de Arousa suscribieron un convenio urbanístico que había sido aprobado por el pleno municipal en sesión de 28 de octubre de 2004. El convenio fijaba como principal compromiso que la empresa se obligaba a trasladar sus instalaciones al parque empresarial de O Pousadoiro para, de este modo, evitar una posible deslocalización de la empresa a otra ubicación fuera del municipio.

Por su parte, la Administración local se comprometía al cambio de uso y edificabilidad de los terrenos que ocupaba la antigua fábrica durante la revisión del PXOM, en un plazo máximo de dos años a partir de la firma. En el año 2009, en cumplimiento de lo pactado en el convenio urbanístico, la empresa trasladó sus instalaciones al polígono de O Pousadoiro, lo cual supuso para la compañía una inversión de unos 43 millones de euros.

Por el contrario, según señalan ahora los propietarios de Lantero, "el ayuntamiento no solo incumplió los compromisos establecidos en el mismo, por lo que el convenio no fue incorporado al planeamiento general del municipio, sino que ha mantenido una inacción total desde su aprobación".

Como defiende la familia, esta situación ha supuesto que Lantero no pudiera disponer de los recursos derivados de la venta de los terrenos para la construcción de la nueva fábrica. "Lo que nos obligó a tener que recurrir a préstamos bancarios por importe de 22 millones de euros, que hemos tenido que pagar con sus correspondientes intereses", ha recordado Andrés Lantero.

CUENTAS PENDIENTES. La intención de los responsables de la empresa "no es saldar cuentas pendientes ni reclamar los gastos" que han asumido "como consecuencia del incumplimiento del convenio durante 14 años". "Lo único que pretendemos es que mediante una resolución judicial se obligue al Ayuntamiento de Vilagarcía a cumplir con lo firmado y las condiciones fijadas en el convenio se incluyan en la redacción del nuevo PXOM", argumentan.

No obstante, los propietarios de los terrenos de Lantero afirman que en el caso de que el incumplimiento por parte del consistorio se mantenga se reservan el derecho de solicitar también en los tribunales la indemnización correspondiente por los perjuicios que a la empresa se le ha causado en estos 14 años.

TRATO DE FAVOR. De este modo, aseguran que no quieren ningún "privilegio" ni ningún "trato de favor" por parte del Ayuntamiento de Vilagarcía. "Lo que sencillamente pretendemos es algo tan elemental como que el ayuntamiento cumpla con su parte del convenio como nosotros cumplimos en su momento con la nuestra", ha indicado Francisco González Cudeiro.

Los responsables de Lantero han manifestado su malestar por el hecho de que se haya hablado de esta operación como un pelotazo urbanístico. "Nuestra familia siempre se ha dedicado al ámbito empresarial. Nunca hemos tenido ni tendremos intereses ni negocios inmobiliarios. Lo único que pretendíamos era poder vender esos terrenos para sufragar en parte el coste del traslado de la fábrica a las nuevas instalaciones", ha señalado Andrés Lantero.

CONVENIO LEGAL Y VIGENTE. Los responsables de Lantero consideran que el convenio urbanístico suscrito el 25 de noviembre de 2004 es "plenamente legal, válido y eficaz". Con todo, añaden que "si el Ayuntamiento de Vilagarcía de Arousa considera ahora que el convenio es ilegal, tendrá que formular la correspondiente declaración de lesividad y solicitar en los Tribunales que se anule. Pero mientras tanto, como ordena la legislación urbanística gallega, el convenio vincula al Ayuntamiento y debe ser incorporado al PXOM en tramitación".

El que fuera director general de Lantero señala que aunque considerna que el convenio "se ajusta en su totalidad" al marco legal actualmente en vigor, la "buena voluntad" de la empresa los ha llevado a manifestarle al gobierno local su "voluntad de aceptar que pudiera ser actualizado en alguno de sus puntos", siempre que no se modificasen las cuestiones sustanciales.

"Pero ni así", añade González Cudeiro, que incide en que "la prueba" de ello es que sin haberles hecho llegar "ningún tipo de comentario previo", los responsables municipales han decidido "de modo unilateral no incluir el convenio en la revisión del PXOM".