Sin llegar a los niveles históricos de 2017, el año que está a punto de concluir deja un buen sabor de boca a los profesionales del sector turístico de Sanxenxo. El broche de oro a 2018 lo puso el pasado fin de semana la celebración de la V A Lanzada Ocean Race, una prueba deportiva, organizada por el Náutico de Portonovo, que atrajo a un gran número de participantes, lo que influyó positivamente en lo que a reservas y pernoctaciones se refiere.
Tanto el Consorcio de Empresarios Turísticos de Sanxenxo (CETS) como la Asociación de Viviendas Turísticas de Galicia (Aviturga) se muestran satisfechos con los resultados obtenidos durante el recién finalizado Puente de la Constitución. El presidente de CETS, Francisco González, apunta que, aunque resultó un parón más corto que el año pasado (cuando se prolongó desde el miércoles 6 hasta el domingo 10 de diciembre), «la sensación que tenemos es satisfactoria, aunque, al ser un puente más reducido, fundamentalmente hemos recibido turistas de proximidad».
La Ocean Race ayudó a estirar un poco más la actividad del sector, a pesar de celebrarse en plena temporada baja. «Que eventos deportivos o culturales de este calibre se organicen en estas fechas es lo que realmente necesitamos», enfatiza. Desde su creación hace algo más de 15 años, el CETS ha visto cómo la actividad ha ido creciendo progresivamente. «Si en 2002 decíamos que la temporada alta empezaba el 15 de junio y acababa el 30 de agosto, ahora podemos asegurar que la actividad es óptima hasta finales de septiembre. De hecho, este mes podría situarse ya prácticamente al mismo nivel que julio, especialmente cuando las condiciones meteorológicas acompañan, como ha sucedido este año», asevera Francisco González.
El presidente del consorcio sanxenxino opina que el impacto de la A Lanzada Ocean Race se dejó notar especialmente en establecimientos hoteleros situados en las inmediaciones de la playa de A Lanzada, uno de los puntos neurálgicos de la prueba deportiva.
La incidencia de esta competición no solo se dejó notar en hoteles, sino también en apartamentos turísticos. Así lo reflejan los responsables de Aviturga, que señalan que en Sanxenxo «estuvo a punto de colgarse el cartel de completo». La agrupación señala que esta situación también se vivió en otros municipios como Vigo, donde el tirón del alumbrado navideño tiene mucha fuerza.
La asociación Aviturga fija la ocupación en Sanxenxo en un 70%, un cinco por ciento más que en Cambados o Bueu. Solo Pontevedra (74%) y Vigo (75%) mejoran los registros alcanzados en la villa de O Salnés.
