Ola de solidaridad provincial con Sara Cernadas

La joven de Sanxenxo, madre soltera, con tres hijos, ha recibido estos días el apoyo de particulares, lo que le hace "creer en la humanidad", y continúa con la búsqueda de una vivienda con un alquiler bajo en la que "poder empezar de cero"
Sara Cernadas, en la vivienda que debe abandonar. GONZALO GARCÍA
photo_camera Sara Cernadas, en la vivienda que debe abandonar. GONZALO GARCÍA

APENAS cuatro días después de que este periódico hiciera pública la historia de Sara Cernadas, madre soltera de Sanxenxo, de 27 años, a cargo de tres hijos de 5, 4 y 3 años, que actualmente atraviesa una difícil situación económica, la vecina del municipio ha podido ya sentir el cariño de personas de toda la provincia de Pontevedra, que le han mostrado su apoyo tanto emocional, como económico, en la medida de lo posible, y a través de la donación de alimentos.

Para Sara, que este sábado mostraba esperanzada la factura por valor de 104 euros del taller en el que por fin pudo cambiar dos ruedas del coche, y que se disponía a ir al supermercado a hacer una compra de bienes de primera necesidad, después de recibir una donación económica de dos particulares, cualquier ayuda supone un pequeño respiro en su día a día.

"Gestos como el del chico de ayer, que hasta le trajo a los niños chocolates, me hacen creer en la humanidad", contaba, emocionada, horas después de recibir la donación de un lote de alimentos, que además incluía un cariño a los pequeños de la casa en forma de calendarios de Adviento. "Se lo agradezco con todo mi corazón", aseguró. "Otra gente también me ofreció ropa y apoyo. A todos, les estoy muy agradecida".

Necesita acceder a una vivienda en la zona de Sanxenxo cuyo alquiler no supere los 350 euros para poder hacer frente al pago 

Cabe recordar que la difícil situación económica de esta vecina de Sanxenxo supuso tener que lidiar con situaciones tan extremas como que el pinchazo de una rueda de su vehículo la obligara a transitar dos semanas con la rueda de repuesto del turismo, ante la imposibilidad de acudir al taller por no disponer de solvencia para asumir el coste del cambio de la rueda.

"Me duele entrar en el supermercado y no tener para comprarle a los niños un huevo de chocolate, o una bolita de esas de 1 euro de las máquinas. Yo no quiero vivir así", contaba a este periódico hace unos días.

Tras paliar las pequeñas situaciones diarias como la compra de comida y bienes de primera necesidad, a Sara Cernadas todavía le queda un gran bache que sortear. Se trata del acceso a una vivienda digna, en la que poder volver a empezar con sus hijos.

En este sentido, cabe recordar que la vecina de Sanxenxo, por razones de logística familiar, necesita una vivienda situada en el municipio de Sanxenxo o alrededores más próximos, y cuyo alquiler mensual no supere los 350 euros.

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Con un salario mensual de 600 euros, ya que actualmente se encuentra trabajando a media jornada en un establecimiento del sector alimenticio, Cernadas necesita acceder a un piso de esas condiciones para poder asumir su coste.

Además, sobre ella penden todavía tres meses de atraso del actual inmueble en el que vive temporalmente, y del que necesita salir con urgencia, ya que, para habitarlo, cuenta momentáneamente con el "permiso" de los actuales propietarios, puesto que el piso, situado en Sanxenxo, ha sido vendido recientemente. Por ello, la necesidad de mudarse es imperante.

"Espero poder conseguir ese piso y empezar de cero. La situación es angustiante, porque todavía tengo que poder pagar las deudas de este. Cualquier ayuda, la agradezco con todo mi corazón", dice.

INTERÉS ESTATAL. En los últimos días, varios medios de comunicación se han interesado por la situación de esta vecina de Sanxenxo, tanto a nivel provincial como autonómico.

De hecho, la historia de Sara Cernadas ha despertado incluso el interés de una cadena a nivel estatal, en la que en las próximas horas también lanzará su grito de auxilio. Cernadas se ha mostrado conmovida por el apoyo recibido y también esperanzada con el futuro.

Ahora, poder dar un paso al frente depende del gesto solidario que pueda ayudarle a hacer efectivo ese cambio de vivienda que tanto necesita.

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