El pintado del muro de Silgar, sobre el que se han escrito ríos de tinta en los últimos días, no es la única actuación controvertida que se está llevando a cabo estos días en el entorno de la playa más famosa de Sanxenxo. A aproximadamente un kilómetro de distancia del tramo de hormigón que colorean alumnos del Centro de Arte, coordinados por la joven Belén Daporta, Punta Vicaño, uno de los espacios públicos más emblemáticos de la villa, presenta una desnudez inusual. La causa, la tala de más de medio centenar de árboles, acometida por la Concellería de Medio Ambiente. El departamento municipal inició estas tareas a principios de mayo, con el objetivo de retirar una serie de pinos cuyo deterioro "podería supoñer un risco para os usuarios do espazo público".
De esta manera, la sombra que acostumbra a ofrecer este paraje, situado entre los arenales de Silgar y Baltar, y que resulta especialmente tentadora en verano, brilla por su ausencia. Quienes pasean estos días por la zona muestran su desconcierto por el aspecto del parque. El Concello apunta que se trata de algo temporal, un hecho que no ha impedido que diferentes colectivos hayan puesto el grito en el cielo al pasar revista a un emplazamiento por el que pasean habitualmente numerosos vecinos y visitantes y que cuenta con un parque infantil y otro biosaludable.
Los responsables municipales de Marea instan al PSOE y al BNG a que soliciten un Pleno para abordar este asunto
MAREA. Marea Sanxenxo es una de las agrupaciones más críticas con esta actuación. Tanto es así, que sus responsables no dudan en exigir la dimisión inmediata del responsable de Medio Ambiente, el popular Juan Antonio Deza. Y es que, a su juicio, el proyecto se está desarrollando "de xeito grave e irresponsable". La agrupación municipal considera que la actuación "amosa que o señor Deza non está capacitado para dirixir esta Concellería" y hace mención a otros trabajos que también fueron criticados en su momento, como "a súa pasividade ante as verteduras rexistradas na praia da Carabuxeira, o arraso das dunas de Baltar para a celebración dunha carreira escolar o a súa falta de compromiso coa rexeneración de varias praias". Por todo ello, Marea entiende que Deza "non presenta o perfil axeitado para asumir o cargo que ocupa".
De momento, los grupos de la oposición todavía no se han pronunciado al respecto, a pesar de que esta asociación considera que el PsdeG-PSOE y el Bloque Nacionalista Galego "deberían actuar en consecuencia" y solicitar la convocatoria de un Pleno extraordinario "urxente e monográfico", en el que el Gobierno local dé explicaciones sobre la retirada de los árboles.
En todo caso, el Ayuntamiento tiene clara su hoja de ruta, que pasa por completar la eliminación de los ejemplares que fueron atacados por un hongo, lo que "provocou o seu avanzado estado de deterioro", y replantar otros 50 pinos. Además de esta especie, en Punta Vicaño también pueden encontrarse acacias, eucaliptos, robles y loureiros. La Administración local también apuesta por la tala de varios árboles situados en el área recreativa de Baltar. Al igual que en Punta Vicaño, se prevé plantar 35 sustitutos.
